El primer ministro japonés, Shinzo Abe, pidió el jueves que se cierren provisionalmente las escuelas públicas del país a partir del lunes para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
“El gobierno pone la salud y la seguridad de los niños por encima de todo”, dijo Abe ante la prensa. “Pedimos a todas las escuelas públicas infantiles, de primaria y de secundaria (de todo el país) que cierren provisionalmente a partir del 2 de marzo y hasta las vacaciones de primavera”, que serán a finales del mes que viene, agregó.
Contener la epidemia
El gobierno de Tokio ha generado críticas internacionales e internas por la forma en que se ha manejado la crisis del crucero Diamond Princess, en cuarentena después de que varios pasajeros contrajeran el virus.
Más de 700 personas que se hallaban a bordo del Diamond Princess han dado positivo. Además docenas de pasajeros que recibieron autorización para desembarcar del crucero han desarrollado síntomas, incluida la fiebre, después de que algunos de ellos dieran inicialmente resultados negativos.
“El proceso con la cuarentena no ha sido perfecto” admite Norio Ohmagari, director del departamento de enfermedades infecciosas en el Centro nacional de Japón de salud global y medicina. “Eso es un hecho que ahora estamos constatando” agrega.
Pero el experto alega que el gobierno japonés se ha hallado frente a una situación difícil, con capacidad limitada para implementar una cuarentena en el crucero, y sometido a presiones para reducir el período de aislamiento de los pasajeros.
“Debemos decir que el proceso ha sido bastante difícil“, asegura el experto. Añade que no hay prueba de que los pasajeros hayan infectado a otras personas tras haber abandonado el barco.
“Tenemos que ver lo que ocurre en una o dos semanas” dice Ohmagari, que reconoce que el proceso “puede no haber sido perfecto”.
