La Policía Nacional del Perú (PNP), inició un patrullaje motorizado e incrementó el número de agentes policiales en la zona de la frontera con Chile para evitar paso de los migrantes indocumentados, según lo señaló el capitán PNP Edinson Palacios Pérez, desde Tacna.

El Gobierno de Perú desplegó 180 agentes de la Policía Nacional para prevenir “el ingreso irregular de migrantes al país” a través de distintos puntos de la frontera con Chile, informó el Ministerio del Interior.

Según la información oficial, los policías proceden de comisarías y unidades especializadas de la XIV Macro Región Policial, de la región sureña de Tacna.

Todos ellos cumplen sus tareas en tres turnos de patrullas en camionetas, motos y cuatrimotos.

“Algunos de los vehículos están ubicados en espacios estratégicos de la línea fronteriza para disuadir a los extranjeros que intentan acceder al territorio nacional de manera irregular”, agregó.

Esto ocurre luego de que se conociera que grupos de migrantes se han reunido en la zona de frontera entre Chile y Perú, como ocurrió en abril pasado.

Es por esto que representantes de la Superintendencia Nacional de Migraciones y de la policía peruana informaron a los ciudadanos extranjeros los mecanismos “para que regularicen su situación migratoria y puedan ingresar al Perú”.

Medidas en la frontera de Perú con Chile

El ministerio peruano precisó que este miércoles permanecían en la zona unos 30 ciudadanos extranjeros, principalmente haitianos, así como venezolanos y colombianos.

Remarcó que estos migrantes se ubicaron “en el lado chileno” de la carretera Panamericana Sur, que une a ambos países.

Durante abril pasado, cientos de migrantes en condición irregular decidieron salir de Chile, la mayoría de ellos de nacionalidad venezolana y haitiana.

Todos ellos quedaron varados en la zona de frontera con Perú en condiciones críticas y sin documentación para entrar a otros países de la región.

Según Amnistía Internacional (AI), al menos 300 personas permanecieron en la frontera bilateral “en una situación humanitaria crítica, sin alimentos, agua, alojamiento o asistencia sanitaria en el desierto conocido por sus condiciones extremas”.

Crisis migratoria en la frontera

Esta situación comenzó a cambiar a inicios de mayo con el traslado, en un vuelo especial, de más de un centenar de venezolanos de regreso a su país.

Además, llevó a un importante incremento de los controles policiales y militares en ambos lados de la frontera.

El pasado 22 de mayo, el viceministro de Exteriores de Perú, Ignacio Higueras, y la subsecretaria de Exteriores de Chile, Gloria de la Fuente, aseguraron en Lima que la crisis migratoria se había superado gracias al trabajo de ambos países.

Higueras afirmó que ambos países buscan “una migración ordenada, regular y segura” y De la Fuente dijo que había que proyectar una agenda de trabajo.

El viceministro peruano detalló que trataron temas como mejorar la coordinación policial entre ambos países y trabajar un plan de prevención conjunto por si ocurría una situación similar de crisis en el futuro.

Además intentan prestar atención a los casos humanitarios en la frontera y el retorno voluntario de ciudadanos venezolanos a su país.