El presidente electo de El Salvador, Nayib Bukele, fue absuelto ayer en un juicio por violencia machista por el cargo de expresiones de violencia contra la mujer en contra de una exsíndica de la Alcaldía de la capital, San Salvador.
Se trata de un fallo que le permitirá dedicarse ahora plenamente a la transición, proceso que quedó inmerso en una polémica por la suspensión de las reuniones con el Gobierno saliente para la ceremonia de traspaso.
“Fue una sentencia absolutoria totalmente, inocente y sobreseimiento definitivo” con lo que “se acaba un año y medio de un circo político”, dijo Bukele al salir del tribunal.
En setiembre de 2017 la exsíndica Xochitl Marchelli denunció a Bukele, entonces alcalde de San Salvador, por supuestamente agredirla verbalmente durante una reunión del concejo municipal. El fallo se basa en que no hubo pruebas que comprobaran tal denuncia de agresión.
Marchelli, acusó a Bukele de haberle lanzado una manzana y haberle llamado “bruja”, según detallan medios locales como la revista Gato Encerrado, donde hablan de esta y varias polémicas que rodean al mandatario electo.
Esa supuesta agresión motivó que el gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda) expulsara a Bukele de sus filas el 10 de octubre de 2017.
El mandatario electo, que tomará posesión el 1 de junio próximo, siempre negó haber cometido una agresión y culpó al FMLN de usar el caso como excusa para sacarlo del partido e impedir su participación en los comicios presidenciales del pasado 3 de febrero, en los que obtuvo la victoria.
El mandatario electo, de la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), señaló que “ni un solo testigo” de los 9 que declararon respaldó la acusación del Ministerio Público.
Peleas con el saliente gobierno
Esta victoria judicial de Bukele se da en medio de una polémica por la organización de la ceremonia de toma de posesión.
Horas antes de que se instalara el juicio, Bukele publicó en sus redes sociales que ha instruido a sus “delegadas a suspender todo contacto con el Gobierno” tras días de “chantajes de la Presidencia “para tratar de “negociar cosas que nada tienen que ver”.
“Vamos suspender todo contacto con el Gobierno actual y vamos a esperar qué sucede”, añadió Bukele y aseguró que “si no se hace un acto, hacemos un acto con el pueblo”.
Después de días de chantajes de @presidencia_sv, tratando de negociar cosas que nada tienen que ver, a cambio de hacer una Toma de Posesión (acto que se ha hecho siempre en nuestra historia reciente), he instruido a nuestras delegadas a suspender todo contacto con el Gobierno.
— Nayib Bukele (@nayibbukele) 28 de marzo de 2019
El jefe de Estado electo ganó los comicios presidenciales del pasado 3 de febrero en primera vuelta con 1.434.856 votos (53,1 %).
El holgado triunfo de Bukele representa el fin del bipartidismo instalado durante décadas en el Gobierno, con la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que se repartieron las últimas cinco administraciones.
Bukele asumirá como presidente de El Salvador para los próximos cinco años en relevo del excomandante guerrillero Salvador Sánchez Cerén, del FMLN.
