El actor francés, que por estos días presenta un espectáculo musical en Francia, compartió su postura frente al conflicto bélico.

El actor francés Gérard Depardieu, conocido por su amistad personal con el presidente ruso, Vladímir Putin, anunció este miércoles que cancela dos recitales que tenía previstos esta semana porque la gravedad de la situación hace que no se sienta con ganas de cantar.

El intérprete debía actuar en “Depardieu chante Barbara” el viernes y sábado en el teatro Anthéa de Antibes, en la Costa Azul francesa.

“Pero dada la gravedad de los acontecimientos entre Rusia y Ucrania no me siento con la fuerza de cantar mi Barbara tal como me gustaría. Tendré el inmenso placer de reencontraros, tal vez, el 24 y 25 de mayo en un mundo en paz”, dijo en un mensaje publicado en la página web de esa sala.

El director de Anthéa, Daniel Benoin, añadió en ese comunicado que está de acuerdo con su decisión porque les parecía “difícil hacer un espectáculo tan bonito y sensible en las circunstancias bélicas actuales”.

El concierto anulado dura una hora y 45 minutos y es un homenaje a la cantante y compositora francesa Barbara, en el que Depardieu recita sus canciones acompañado del pianista de esta última, Gérard Daguerre.

No es la primera vez que el protagonista de “Cyrano de Bergerac” (1990) o de la saga “Astérix y Obélix” (1999-2012) se pronuncia sobre la guerra en Ucrania desde la ofensiva lanzada por Rusia el pasado 24 de febrero.

Este martes pidió que se ponga fin al conflicto e invitó a los contendientes a negociar.

“Rusia y Ucrania siempre han sido hermanos. Estoy contra esta guerra fratricida. Les digo: ‘Paren las armas y negocien"”, dijo en una declaración a la agencia de prensa francesa AFP, según la cual fue el propio actor quien les llamó para dar su opinión.

Depardieu, que en 2013 adoptó la nacionalidad rusa en protesta por la política fiscal del entonces presidente, el socialista François Hollande, alaba regularmente a Putin, a quien ha llegado a comparar con el papa Juan Pablo II, y en varias ocasiones ha considerado a Rusia como “una gran democracia”.