Sin lugar a dudas, una de las actrices más talentosas y queridas de Hollywood es la entrañable Reese Witherspoon, quien a sus 45 años lleva más de tres décadas ligada al mundo del celuloide.

Y es que, con tan sólo 14 años hizo su debut en el cine con la recordada película Amor de Verano (1991), en la que interpretó el papel principal de ‘Dani Trant’, una chica de campo que se enamora por primera vez de su vecino de 17 años.

Desde entonces, su carrera en el cine ha ido en ascenso con cintas como Juegos Sexuales (1999), donde conoció a su primer esposo, el actor Ryan Phillippe, y la saga Legalmente Rubia.

No obstante, su carrera daría un giro con su rol en el filme Johnny y June: Pasión y Locura (2005), centrado en la vida del cantante Johnny Cash. Su magistral interpretación de la cantante e interés amoroso del artista, June Carter, la hizo merecedora del Óscar, Globo de Oro y BAFTA a Mejor Actriz.

Alma Salvaje

No obstante, más allá de los galardones, hubo otra película que marcaría de forma radical la vida de la actriz, llevándola a los extremos de su paciencia y resiliencia.

Hablamos de Alma Salvaje, cinta biográfica centrada en el libro bestseller Salvaje escrito en 2012 por Cheryl Strayed, una renombrada bloguera estadounidense.

En sus memorias, Strayed relata su experiencia tras decidir caminar sola más de mil kilómetros del Sendero del Macizo del Pacífico -un camino de más de 4 mil kilómetros que abarca desde México hasta Canadá-, como una forma de curarse a sí misma tras su divorcio, la temprana muerte de su madre y los años de conducta imprudente y destructiva.​

Impresionada por lo vivido por Cheryl, en 2014 Whiterspoon decidió producir y protagonizar la historia, sin pensar que cambiaría su vida para siempre.

Problemas de salud

En una reciente conversación con la revista Interview, Reese confesó que el papel que más la cambió en toda su carrera fue el de Strayed.

Y es que la actriz tenía tanto miedo de enfrentar la envergadura y soledad que implicaba el rol, que incluso tuvo severos ataques de pánico semanas antes de la filmación.

“Tenía tanto miedo de hacer eso (…) estaba tan asustada. Tuve ataques de pánico durante tres semanas antes de comenzar (el rodaje)”, señaló sobre los días previos al inicio de las filmaciones, en los que tuvo que grabarse con una mochila de más de 30 kilos a cuestas.

A ello, agregó que “Estaba el aspecto de la desnudez, la sexualidad y el uso de drogas, pero también estar sola frente a la cámara sin otros actores. No había estado sola en escenas durante días y días. Hubo cerca de 25 días de rodaje en los que no tuve ningún otro actor frente a mí. Éramos solo yo, una cámara y una mochila“.

Pese a ello, sacó fuerzas de flaqueza para llevar adelante un papel que, a su juicio, era importantísimo mostrar al público. “El libro de Cheryl Strayed fue tan hermoso y sagrado para mí porque me habló profundamente sobre cómo nosotras, como mujeres, tenemos que salvarnos. No hay madre ni padre que vengan a salvarnos. No hay cónyuge. Pensé que era radical que al final de la película ella termine sin familia, sin dinero, sin trabajo, sin pareja, y está feliz”, expresó.

La solución

Tras verse afectada por estos ataques, Witherspoon confesó que buscó ayuda profesional a través de un tratamiento de hipnosis.

De acuerdo al psicólogo chileno y especialista en hipnosis clínica Gustavo Fierro, la hipnosis es un estado de consciencia especial que permite lograr cambios de conducta y liberación de emociones en el paciente.

En relación a los tratamientos, existe la hipnosis regresiva y la hipnosis progresiva. La primera “permite que el paciente pueda regresar al origen de su problema, con el objetivo de evocar la emoción que está generando el sufrimiento (no es una re-victimización) y sanarse a partir de integrar en su mente, de una manera distinta, un suceso que pudo ser traumático. De esta manera, la persona resignifica la experiencia y puede liberarse de la carga afectiva que pudo haber tenido en el momento que la vivió. Se integra como un acontecimiento más de su vida”.

El progresivo, en tanto, “permite que el paciente, en el estado hipnótico, pueda vivir una experiencia adelantado en el tiempo, con el objetivo de generar un adecuado control de emociones, empoderamiento y seguridad en sí mismo. Por lo tanto, el momento en que vive la experiencia es sentido como si ya lo hubiera vivido anteriormente”. Este tipo de terapia “es muy utilizada para el apoyo de los alumnos que van a rendir la PSU y el examen de grado de diferentes carreras como Derecho, Medicina e Ingeniería”, comentó el experto.

Finalmente, Fierro menciona que “los resultados de las investigaciones científicas han demostrado que la hipnosis, a nivel biológico, genera en el cerebro humano, lo siguiente: permite establecer nuevas sinapsis; enriquece la arborización dendrítica; aumenta la neuroplasticidad; y produce cambios metabólicos de la glucosa y el oxígeno en el neurosoma”.

¿Qué son los ataques de pánico?

De acuerdo a lo informado por la prestigiosa Clínica Mayo, un ataque de pánico es un episodio repentino de miedo intenso que provoca reacciones físicas graves, pese a que no exista ningún peligro real o causa aparente. Cuando se presenta un ataque de pánico, puedes sentir que estás perdiendo el control, que estás teniendo un ataque cardíaco o, incluso, que vas a morir.

De momento se desconoce la causa exacta de los ataques de pánico, aunque estos factores pueden influir: la genética; un alto nivel de estrés; un carácter que es más sensible al estrés y proclive a las emociones negativas; o ciertos cambios en la manera en que funcionan las partes del cerebro.

“Muchas personas tienen solo uno o dos ataques de pánico en toda su vida, y el problema quizás desaparece cuando se resuelve una situación estresante. Sin embargo, si tienes ataques de pánico inesperados y recurrentes, y pasas mucho tiempo con miedo constante de sufrir otro ataque, es probable que tengas una afección llamada ‘trastorno de pánico’“, agregó la organización.

Además, indicaron que pese a que estos ataques en sí mismos no ponen en riesgo la vida, pueden provocar mucho miedo y afectar, de manera significativa, la calidad de vida de quien los padece. Sin embargo, afirman que el tratamiento puede ser muy eficaz.

Engin Akyurt | Pexels

Síntomas de los ataques de pánico

Desde la Clínica Mayo explicaron que los ataques suelen comenzar de forma súbita, sin advertencia. “Pueden aparecer en cualquier momento: cuando estás conduciendo, en un centro comercial, cuando estás profundamente dormido o en medio de una reunión de negocios. Puedes tener ataques de pánico ocasionales o con frecuencia”, expresaron.

“Los ataques de pánico tienen muchas variantes, pero los síntomas suelen alcanzar su punto máximo en cuestión de minutos. Después de que el ataque de pánico desaparece, puedes sentirte fatigado y exhausto“, añadieron.

Sumado a ello, indicaron que debes estar atento a los siguientes síntomas:

– Sensación de peligro o fatalidad inminente
– Miedo a perder el control o a la muerte
– Taquicardia y palpitaciones
– Sudor
– Temblores o sacudidas
– Falta de aliento u opresión en la garganta
– Escalofríos
– Sofocos
– Náuseas
– Calambres abdominales
– Dolor en el pecho
– Dolor de cabeza
– Mareos, sensación de desvanecimiento o desmayos
– Sensación de entumecimiento u hormigueo
– Sentimientos de irrealidad o desconexión

Andrea Piacquadio | Pexels

¿Cuándo debes acudir a un experto?

Desde la clínica indicaron que si tienes síntomas de ataque de pánico, debes buscar ayuda médica lo más rápido posible. “Si bien los ataques de pánico son sumamente incómodos, no son peligrosos. Sin embargo, son difíciles de controlar por cuenta propia y pueden empeorar si no se tratan“, añadieron.

Finalmente, señalaron que “Los síntomas de los ataques de pánico pueden ser similares a los de otros problemas de salud graves, como un ataque cardíaco, por lo que es importante que el proveedor de atención médica te evalúe si no estás seguro de qué está causando tus síntomas”.