El Gobierno respondió a las isapres, las que anunciaron que se restarían del diálogo, argumentando que no habían fechas ni medidas concretas ni propuestas para abordar su crisis, pidiendo aclarar si la intención del Ejecutivo era "querer dejar caer al sistema privado".

El Ministerio de Salud (Minsal) anunció este sábado que convocará a una reunión con las comisiones de Salud del Congreso, luego que las isapres decidieran marginarse de la mesa de trabajo del sector y suspender el diálogo con el Ejecutivo, y recalcó que ellas “son responsables” de su crisis.

Minsal “convocará a una reunión el viernes 03 de febrero, con las Comisiones de Salud de la Cámara de Diputados y del Senado, para explorar de manera conjunta las alternativas legislativas que permitan la implementación de soluciones en el corto plazo y, de esta forma proteger a las personas que hoy están bajo dicho sistema”, expresó la cartera de Salud por medio de un comunicado.

Indican que el objetivo es “continuar trabajando en respuesta a la situación que enfrentan las isapres, a raíz del dictamen de la Corte Suprema, y proteger a los actuales afiliados al sistema privado”.

“El gobierno ha tomado la decisión de continuar el trabajo con el parlamento tras sostener una ronda de conversaciones con los legisladores, luego de que la Asociación de Isapres, decidiera congelar su participación en la mesa que mantenía con el Ministerio de Salud”, recalcan desde el Ejecutivo.

A juicio del Minsal, “la Corte Suprema ha sido clara en su fallo, las isapres son responsables de la situación que enfrentan”.

Añaden que “el gobierno hará lo que es debido, que es respetar y dar cumplimiento a dicho fallo, junto con encontrar soluciones para proteger a las y los usuarios y sus prestaciones de salud. En esa línea se seguirá trabajando, junto con los proyectos para modernizar el seguro público”.

Finalmente, desde el Gobierno aseguran que Minsal “mantiene su disposición a dialogar con todos los actores que aporten de manera constructiva a la discusión”.

El viernes, las isapres anunciaron que se restarían del diálogo con el Ejecutivo, argumentando que no habían fechas ni medidas concretas ni propuestas para abordar su crisis, pidiendo aclarar si la intención era “querer dejar caer al sistema privado”.