La cápsula New Shepard de Blue Origin culminó con éxito su primer vuelo tripulado al límite del espacio este 20 de julio, con el fundador de la compañía, Jeff Bezos, y otros tres pasajeros a bordo.

El vuelo suborbital automatizado de la nave se prolongó durante 10 minutos y 29 segundos, despegando desde la base Launch Site One que Blue Origin levantó en un área despoblada al oeste de Texas.

Cuatro minutos después del despegue, la nave alcanzó una altura máxima de 107 kilómetros de altitud (algo más de los 100 kilómetros del límite del espacio fijado por la línea Karmán), lo que permitió a los miembros de la tripulación experimantar la ingravidez y admirar desde los grandes ventanales de la cápsula la curvatura del planeta, su superficie y la oscuridad del espacio exterior.

El fundador de Amazon viajó acompañado por su hermano, Mark Bezos, una ex astronauta de 82 años llamada Wally Funk y el estudiante holandés de 18 años Oliver Daemen.

“Wally puede superarnos a todos. Durante el Mercury 13, ella fue mejor que todos los hombres y puedo garantizar que eso sigue siendo cierto hoy”, dijo Bezos durante el vuelo sobre su compañera de viaje, quien fue parte del primer grupo de mujeres en probarse para tripulación espacial.

Tras cumplir su propósito, el propulsor regresó 7 minutos después del despegue de forma autónoma a una plataforma de aterrizaje al norte de su lugar de lanzamiento, mientras que la cápsula volvió a la Tierra en caída libre con tres paracaídas gigantes y, en el último paso, un propulsor que aseguró un aterrizaje suave en el desierto.

Blue Origin

Un sueño cumplido

Bezos, quien hace unas semanas anunciaba su renuncia a Amazon, compañía que fundo y logró convertirla en uno de los grandes comercios tecnológicos, señaló que este viaje significó “el mejor día de mi vida”.

Por su parte, el hermano del magnate, Mark Bezos, dijo en cuando aterrizaron que era “increíblemente bueno. Tienen a una tripulación feliz”.

Captura de pantalla

En cuanto a los otros tripulantes, Daemen y Funk se han convertido, respectivamente, en las personas más joven y más anciana en viajar al espacio. “Fueron como sólo cinco minutos de viaje”, expresó Wally Funk.