Las erupciones de masa coronal de una mancha solar de este tamaño podrían producir auroras boreales en lugares del planeta en los que no son frecuentes. Provocando así, un espectáculo de colores en la atmósfera.

Ya se había previsto que los nuevos ciclos solares son cada vez más intensos, de hecho, es lo normal en la vida de una estrella como la del Sistema Solar en el que se encuentra la Tierra. Si bien, no son dañinas para el planeta, si pueden resultar en un bello espectáculo astronómico, así lo indica el crecimiento de una mancha solar.

Se trata de una de las manchas que habitan en la zona oscura de la superficie solar, estas pueden ser más frías que el resto del material del Sol, pero siguen siendo muy calientes. Desde esas zonas, provienen las llamadas ‘llamaradas solares’.

Una de estas manchas oscuras, que varios astro fotógrafos han captado en imágenes, duplicó su tamaño en las últimas 24 horas. Ahora, mide aproximadamente 3 veces el de la Tierra y se estima que en el futuro, produzca llamaradas solares de clase media.

Estos datos están siendo registrados por la plataforma Space Weather, que se encarga de monitorear los fenómenos espaciales y los cambios en el Sistema Solar.

La enorme mancha fue llamada AR3038 y está apuntando directamente hacia la Tierra. En el caso de que esta zona del Sol produjera una eyección de masa coronal, habría algunos efectos (no peligrosos) en el planeta. Así lo informa Muy Interesante.

Una eyección de masa coronal proveniente de esta mancha solar significaría la expulsión de partículas cargadas directamente hacia la Tierra. Estas interactuarían con el campo magnético del planeta y podrían significar un peligro para algunos satélites en órbita y redes eléctricas.

Incluso, al contacto con el campo magnético, podrían producir auroras boreales en lugares del planeta en los que no son frecuentes. Provocando así, un espectáculo de colores en la atmósfera.

Estos efectos y el crecimiento constante de las manchas oscuras que albergan en el Sol, se generan porque actualmente se acerca la etapa más activa del ciclo solar. Además, se prevé que alcanzará su punto máximo en 2024.