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Álvaro Campos presenta en su libro "Negocio familiar" una serie de textos breves divididos en cuatro capítulos que exploran sus recuerdos, anécdotas y reflexiones desde su experiencia como comerciante, sus raíces en un barrio marcado por la precariedad, y su faceta como escritor e intelectual. El autor aborda temas como la relación entre el dinero y el espíritu, la pobreza "informada" y la nobleza de la riqueza, utilizando citas y reflexiones sensibles, agudas y ácidas. La obra provocando reflexión y cuestionamiento sobre la coherencia en el mundo actual.
“´El dinero no da la felicidad´ es una frase reaccionaria, dicha por quien tiene dinero y pronunciada para evitar que otros lo tengan. El dinero te acerca al lujo y el lujo es alegría. Y sin alegría la vida no vale nada.” (p 103)
Álvaro Campos entrega, en Negocio familiar, una serie de textos breves reunidos en cuatro capítulos: Mañana, Mediodía, Tarde y Noche. Son recuerdos, anécdotas, reflexiones a partir de su propia biografía, vivencias o de citas de muy diversos autores.
Negocio familiar es un divagar, muchas veces lúcido, donde su origen, su trabajo al frente de un local comercial familiar y sus inquietudes intelectuales y literarias llevan a un libro que atrae, provoca y cautiva, al tiempo de generar dudas y, a ratos, molestia y rechazo. Lo que también se agradece, porque invita a reflexionar, cuestionarse, y a no dar por sentado una coherencia que es evidente que no existe en el mundo que nos rodea ni en las pantallas.
Negocio familiar
Álvaro Campos escribe, al menos, desde tres lugares. Lo hace desde su oficio de comerciante, heredado de su padre que, al quedar cesante durante la ruda crisis de 1982, en plena dictadura, se “sumaba al tren de los autónomos”. (p 21) El ser comerciante -y el autor es muy explícito en esto- establece una forma particular de mirar la sociedad, a los demás, a los clientes y vecinos. Y al dinero.
“La figura del comerciante, odiada en la Antigüedad, es contingente, miente y engaña para que el dinero fluya como un manantial, su rapacidad no es noble sino de falsa conciencia.” (p 107-108)
Un segundo lugar de escritura es la de su origen, su barrio, con sus precariedades y sus culturas. Es un lugar de recuerdos, de vivencias y memoria.
“En la primera juventud uno normalmente se hacía amigo con los parecidos; en definitiva, quería ser amigo de sí mismo.” (p 110)
Es una perspectiva que ahonda en una mirada que transita entre la empatía y la necesidad de superar restricciones. De acceder a bienes y a seguridades.
“Actualmente los pobres se mueven en todas direcciones, les está permitido, incluso están obligados, a observar el éxito de los demás, los siete días de la semana, a todas horas del día en directo o por un sinfín de pantallas que muestran placeres injustos. Una pobreza informada. La pobreza definitiva.” (p 90-91)
Por último, Álvaro Campos es escritor -aunque escriba que lo oculta, o lo hace de manera oculta-, lector y un intelectual. Negocio familiar abunda en muchas y muy diversas citas. Citas bien seleccionadas y usadas. Por otro lado, en sus textos hay observaciones y reflexiones sensibles, profundas, perspicaces.
“Desde Sófocles a Paltón, desde Cicerón a Shakespeare, la comunión de dinero y espíritu es detestada. Heine así lo recalca: “Vulgar es el dinero y hay que halagarlo con vulgaridad”. Pero, al contrario, no se ataca de la misma forma a la riqueza y se ve a esta como el patrimonio espiritual de una nobleza inmemorial.” (p 107)
Cazuela popular
Negocio familiar es como una buena cazuela popular. Una mezcla de ingredientes muy diversos para preparar un libro sabroso, contundente, que a juicio de algunos estará perfecto, mientras que, para otros, le pueden faltar algunos ingredientes o sobrar otros.
Negocio familiar, al igual que la cazuela, es difícil de definir, de sintetizar. Porque entre citas y reflexiones profundas, hay provocaciones que pueden parecer innecesarias, incluso gratuitas o fallidas. Sin embargo, este carácter inasible es también una buena demostración de estos tiempos de cambios, de creencias dúctiles. Donde todo pareciera poder caber, incluyendo muchos intolerantes. De provocaciones y falta de lugares claros y seguros donde cobijarse (incluyendo tanto populismo).
“Me pasa lo mismo que a Stendhal: sin dinero en los bolsillos me costaría mucho, por ejemplo, opinar en una mesa donde se hablen temas culturales. Esto es muy común en las poblaciones, me crie en las canchas y allí, en las cantinas de alrededor, observaba que quien levantaba más la voz y al que todos le encontraban la razón era precisamente el que andaba con más dinero en los bolsillos.” (102)
En esta combinación de lugares desde donde escribe y reflexiona, y de diversidad de temas que aborda, Álvaro Campos también incluye fotografías hechas por él. Sus fotos aportan un nuevo ángulo para mirar este mundo aparentemente intrascendente, que cuestiona los lugares oficiales desde donde se proclaman verdades, desde donde artistas e intelectuales se canonizan.
Negocio familiar es una búsqueda de sentido, de un lugar sólido donde situarse, un mirar crítico de entornos, de personas y grupos. Un libro que puede llegar a ser un espejo… con sus ventajas y sus peligros.
Negocio familiar
Sobre el trabajo, la riqueza y el progreso
Álvaro Campos
Editorial Planeta Chilena S.A.
Abril de 2025, Santiago de Chile
