Una epidemia de cólera dejó al menos 18 muertos desde inicios de junio en Sudán del Sur, sacudido desde hace un año y medio por una guerra civil, anunció el martes el ministro de Salud.

La epidemia se originó en los hacinados campos de la ONU en la capital, Juba, donde miles de personas se refugiaron desde el inicio de la guerra civil, explicó el ministro, Riek Gai Kok.

Otros casos fueron detectados fuera de la ciudad.

Al menos 167 personas murieron entre más de 6.400 casos detectados en un brote registrado el año pasado, que fue contenido.

Los análisis de laboratorio “confirmaron que hay un brote de cólera”, dijo Riek Gai Kok, asegurando que las autoridades están mejor preparadas que el año pasado para hacerle frente.

Contener la epidemia de cólera -transmitida a través del agua potable o de alimentos contaminados – supondrá no obstante un nuevo reto de envergadura para el gobierno y las agencias de cooperación.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y las oenegés están llevando a cabo una campaña de vacunación para más de 100.000 personas, según el ministerio de Salud.

Desde el inicio de la guerra civil en diciembre de 2013, más de dos millones de personas huyeron de sus casas y más de 137.000 civiles viven actualmente en los campos de la ONU.

Dos tercios de la población de 12 millones de personas necesitan ayuda, según la ONU.

La guerra civil empezó cuando el presidente Salva Kiir acusó a su ex vicepresidente Riek Machar de planear un golpe, desatando una ola de violencia étnica entre ambos bandos.