La llegada de las temperaturas bajas y las precipitaciones no solo causa estragos en la salud de las personas. Siendo los más pequeños de nuestros hogares, las mascotas deben estar sujetas a cuidados especiales para evitar que se vean afectadas por los males típicos de la estación fría.
En esta época, la traqueobronquitis canina es una de las enfermedades con las que frecuentemente deben lidiar los médicos veterinarios. Conocida vulgarmente como “tos de las perreras”, es una suerte de gripe muy contagiosa que enfrentan los canes.
Por si sola, la tos de las perreras es una molestia con la que deben lidiar los perros por algunos días, ya que que es una enfermedad autolimitante -es decir, que presenta un ciclo determinado y que el propio cuerpo la elimina-. Sin embargo, la veterinaria Camila Morales, de la Clínica Veterinaria San Pedro (en la comuna de San Pedro de la Paz), advierte que si intervienen otros agentes, la tos podría derivar en otras afecciones pulmonares e incluso llegaría a ser mortal.
Por esto, es importante que te mantengas atento en estos días a tu perrito o perrita y advertir si éste podría encontrarse afectado. La prevención es vital para evitar que tu mascota presente mayores complicaciones, por lo que los siguientes datos te serán útiles para no pasar malos ratos y proteger a los principales proveedores de pelos y de cariño en el hogar.
1.- ¿A qué se debe?
En el origen de la tos de las perreras, explica Morales, “afectan tanto bacterias como virus”. En el caso de las bacterias, la más común es la Bordetella bronchiseptica, mientras que el principal responsable entre los virus es el de parainfluenza canina.
2.- ¿Cómo reconocerla?
El propietario debe prestar particular atención si su perro presenta una tos fuerte y ronca que termina con arcadas. “Dichas arcadas son seguidas de secreciones bucales de tipo filamentosa y blancas. La gente suele decir que el perrito bota una saliva blanca“, señala la veterinaria.
3.- ¿Se puede confundir con otras afecciones?
Por lo general, el propietario suele creer que “el perro tiene ‘una cosita atrapada en la garganta‘ e intenta botarla”, afirma la veterinaria Camila Morales. Lo anterior es producto de la irritación que genera esta tos en la tráquea.
Hay que estar atentos también si el perro presenta problemas en su corazón. “Normalmente los cardiópatas -es decir, con afecciones cardíacas- cursan una tos seca, entonces los síntomas se pueden confundir con la tos de las perreras”, agrega.
4.- ¿Qué síntomas se deben tener en cuenta para acudir al veterinario?
Junto con la tos seca, el perro presenta una mucosidad acuosa (transparente y sin otro tipo de secreción), además de la salivación normal tras toser. Eso sí, cuando solamente está afectado por la traqueobronquitis, el animal no presenta problemas de apetito ni tampoco se muestra decaído.
5.- ¿Quienes están más expuestos a la enfermedad?
Los que se encuentran más susceptibles a contraer esta tos son los que han mantenido contacto con otros canes afectados en lugares públicos o en los hogares donde mantengan más de un perro. Los casos suelen concentrarse en otoño e invierno, con la llegada del frío y las lluvias.
6.- ¿Cómo prevenirla?
Lo importante, recalca la profesional, es mantener al perro con una buena inmunidad, sus desparasitaciones y sus vacunas al día, una alimentación adecuada y una buena condición corporal. Para ello es recomendable que el perro sea chequeado periódicamente por un veterinario.
Como en todos los casos, las medidas preventivas son mucho más baratas que la enfermedad, y la veterinaria estima que la vacuna intranasal que se aplica en estas situaciones fluctúa entre los $7.000 y los $10.000 en promedio, la que debe administrarse anualmente.
7.- ¿Cómo tratarla?
El tratamiento puede ir desde los antiinflamatorios -para reducir la irritación en la tráquea- hasta los antibióticos. En el caso de presentar complicaciones, el veterinario podría requerir exámenes adicionales, radiografías de tórax o análisis de cultivo antibiograma del tipo de secreción, con el fin de identificar las bacterias implicadas.
8.- ¿Cuáles son los cuidados para el perro enfermo?
Lo ideal es que el perro afectado por la tos de las perreras permanezca “en un ambiente de confort, calentito, ojalá encerrado en la casa”, recomienda la veterinaria. Si es imposible mantenerlo dentro del domicilio, se requiere que permanezca bajo techo donde no se encuentre expuesto al frío o las lluvias.
Si el paciente comparte con otros perros en el hogar, debe ser aislado para evitar que contagie al resto.