Un estudiante chileno deberá cumplir prisión domiciliaria en el consulado de nuestro país en Asunción, al ser acusado de “perturbación de la paz pública” por haber participado de una supuesta “toma simbólica” del ministerio de Educación de Paraguay, informaron el miércoles fuentes judiciales.
Por orden del juez de Garantías Rubén Ayala, el joven Patricio Javier Flores, de 26 años, cumplirá la prisión domiciliaria en el consulado chileno, donde será mantenido bajo vigilancia policial.
El magistrado le impuso además una multa de unos 2.200 dólares y la prohibición de salir de Paraguay.
Asimismo, advirtió que si viola sus disposiciones, se ordenará su prisión efectiva en el penal capitalino Tacumbú.
Flores fue detenido el lunes en la vía pública en Asunción, acusado de participar junto a una veintena de gremialistas estudiantiles paraguayos de una “toma simbólica” de las oficinas de la ministra de Educación y Cultura, Marta Lafuente, el 2 de octubre pasado.
La policía reportó entonces que una veintena de jóvenes intentaron ingresar a la fuerza a la oficina de la ministra reclamando “inversión del 7% del PIB en educación”, “educación gratuita” y “almuerzo escolar para todos”.
El juez dispuso además que el procesado no podrá tener comunicación alguna con 16 estudiantes secundarios, pertenecientes a la Federación Nacional de Estudiantes Secundarios (Fenaes) de Paraguay.
La fiscalía convocó a declarar a varios miembros de la Federación.
Flores, quien sería militante de la Juventud Comunista de Chile, ingresó el 24 de julio a Paraguay como turista, y en su declaración a la Fiscalía negó haber participado de actos de perturbación de la paz pública.
Su defensor, el abogado paraguayo Gustavo Noguera, dijo que su captura fue irregular.
“Fue subido a una camioneta sin logo por policías de civil, como si estuvieramos en la dictadura de Alfredo Stroessner”, protestó en declaraciones a periodistas.
Una portavoz de la policía, la comisaria Elisa Ledesma, justificó el procedimiento tras señalar que el extranjero “viene al Paraguay a avasallar las instituciones”.
La Federación de Estudiantes Secundarios admitió que el chileno asesora al nucleamiento en sus pedidos de reivindicaciones, dado que participó en las prolongadas manifestaciones estudiantiles que se registraron en Santiago de Chile entre 2013 y parte de este año.
Richard Kennedy, el delegado estudiantil local, calificó la detención de Flores de “medida dictatorial”.
