Alemania conmemoró este sábado los 50 años de la construcción del Muro que escindió la ciudad de Berlín en dos partes antagónicas durante 28 años, separando familias y amigos para convertirse en el símbolo de la división de Europa durante la Guerra Fría.
La ceremonia se inició temprano en la mañana al leerse biografías de personas muertas al pie del Muro, antes de detener a todos los trenes en las estaciones y hacer sonar las campanas de las iglesias a las doce del día.
Dichos muertos “no son las únicas víctimas de este Muro”, estimó el presidente alemán Christian Wulff durante la ceremonia. “Atrás de él, millones de personas tuvieron que renunciar a vivir como querían”, agregó.
Esta conmemoración tiene “un gran significado humano y político”, declaró Isabella Hodalski, una berlinesa que vive en el mismo barrio.
El 13 de agosto de 1961, el régimen comunista de la Alemania del Este empezó a erigir este muro de cemento en Berlín.
La noche del sábado 12 al domingo 13 de agosto de 1961, el dirigente de la República Democrática Alemana, Walter Ulbricht, dio la orden de lanzar la “operación Rosa”. Más de diez mil soldados del régimen comunista empezaron a construir “un muro de protección antifascista” para separar la parte oriental de la ciudad del oeste capitalista.
Las autoridades de la RDA, apoyadas por la Unión Soviética, procuraban terminar con el éxodo de habitantes de la RDA hacia las zonas ocupadas por los aliados, impidiéndoles huir a través del enclave que constituía Berlín Occidental. En agosto de 1961, más de 2,5 millones de personas habían abandonado la RDA, que contaba entonces con 19 millones de habitantes.
El 13 de ese mes, los soldados bloquearon las calles y líneas de tren situadas alrededor de la parte occidental de Berlín. Los metros y trenes suburbanos recibieron de pronto la orden de detenerse. Los berlineses descubrieron al despertar alambrados de púas, vallas y un muro de cemento asomando en sus calles.
El muro, de una altura de 3,6 metros y dotado de 302 miradores, se extendió a lo largo de 155 km, de los cuales 43 dividen en dos la capital alemana.
Entre 1961 y 1989, más de 100.000 personas intentaron huir de la RDA atravesando la frontera entre las dos Alemanias o el Muro de Berlín. Más de 5.000 lograron huir a Berlín Occidental. Al menos 136 personas murieron al pie del Muro.
El Muro cayó veintiocho años, dos meses y 27 días más tarde, al hundirse el bloque soviético. El 9 de noviembre de 1989, los berlineses volvieron a reunirse como se separaron el 13 de agosto de 1961: con lágrimas en los ojos.