La subsecretaria de Salud Pública, Liliana Jadue, hizo hoy un llamado a la población a extremar las medidas preventivas para evitar la propagación en Chile de las denominadas enfermedades entéricas como cólera, hepatitis A, fiebre tifoidea y diarreas que se producen con mayor frecuencia durante el verano.

En el Aeropuerto de Santiago, la funcionaria de Gobierno reiteró que “el Ministerio de Salud ya desplegó a nivel nacional una campaña informativa de prevención que este año tiene un énfasis especial en el monitoreo de eventuales casos de cólera que se puedan registrar en Chile como consecuencia del severo brote de esta enfermedad que afecta a Haití y que ha obligado a la OMS a declarar una alerta sanitaria entre los países miembros de la organización”.

En ese sentido, Liliana Jadue señaló que el plan de acción del Minsal contempla, también, información para quienes viajen al extranjero en los próximos meses y para aquellas personas que regresen desde países en que se presenten brotes de cólera.

Puntualizó que ya se envío la “alerta epidemiológica a las secretarías Ministeriales (SEREMIS) con antecedentes sobre la situación de la enfermedad en Haití y las medidas para el refuerzo de la vigilancia, especialmente en las zonas más afectadas por el terremoto y maremoto, donde las condiciones sanitarias son más precarias para la población”.

La subsecretaria Jadue afirmó que hasta el momento el Instituto de Salud Pública no ha recibido muestras sospechosas de cólera, pero que se está trabajando para enfrentar esa eventualidad, con equipamiento de punta y en coordinación con los laboratorios y hospitales del país públicos y privados.

Cabe destacar que en Chile el último brote de cólera fue reportado en 1998 en San Pedro de Atacama, oportunidad en que se confirmó la presencia de este agente en 23 muestras de pacientes, pero fue rápidamente controlado. Desde esa fecha hasta ahora solo se han reportado casos aislados entre los años 2005 al 2010 de diarrea por Vibrio cholerae No O1 No O139 que corresponde a una cepa no epidémica y que por lo tanto no produce brotes de la enfermedad.

Las medidas de prevención de las diarreas infecciosas y otras enfermedades transmitidas por alimentos y agua, para la población en general deben ir orientadas a: beber siempre agua potable o si no se dispone de ella, hervir toda el agua de consumo; lavado de manos antes de manipular los alimentos, antes de comer y después de ir al baño; manipulación cuidadosa de los alimentos evitando la contaminación cruzada con alimentos de riesgo (carnes y pescados crudos); consumir alimentos como pescados, mariscos y carnes cocidos; lavado de verduras que se consumen crudas con cloro u otros desinfectantes;

lavar y pelar las frutas; después de la cocción y ebullición de los alimentos y protegerlos contra la contaminación.

En tanto, como medidas de prevención para los viajeros, se indica: consumir alimentos y agua seguros; beber agua embotellada con sello intacto o agua hervida al menos por 1 minuto, o tratada con cloro (2 gotas de cloro casero por litro de agua) o yodo 5 gotas por litro; no consumir hielo en los bebestibles; consumir sólo alimentos cocidos, recién preparados y calientes; no consumir ningún alimento crudo como pescados, carnes, mariscos o leche no pasteurizada; no consumir alimentos preparados por vendedores ambulantes; evitar el consumo de frutas crudas y no consumir jugos de frutas; no consumir ensaladas con vegetales crudos.