Luego de que se conocieran los resultados de las presentes elecciones, donde votaron 6.699.627 personas, equivalentes al 46,70% del electorado, el foco de atención comienza a moverse desde las individualidades a los Partidos Políticos.
14 de ellos no lograron los resultados que exige la Ley de Partidos Políticos para mantenerse vigentes después de la elección, por lo que en este momento arriesgan su disolución.
Se trata de Todos (0,05%), el Partido de Trabajadores Revolucionarios (0,08%), MAS (0,16%), el Partido Izquierda Ciudadana (0,24%), Democracia Regional Patagónica (0,34%), Ciudadanos (0,51%), Partido País (0,59%), Partido Regionalista Independiente (0,66%), Partido Liberal (0,78%), Unión Patriótica (0,86%), Amplitud (1,02%), Partido Poder (1,46%), el Ecologista Verde (2,15%) y el Partido Igualdad (2,16%).
La citada ley exige que cada partido alcance un mínimo de 5% de los sufragios válidos en la última elección de diputados, ya sea en ocho regiones o en tres regiones geográficamente contiguas.
Si lo anterior no se logra, también se permite conservar la calidad de partido político logrando un mínimo de cuatro parlamentarios en, a lo menos, dos regiones distintas, sean diputados o senadores.
Para impedir esta situación, los partidos pueden reinscribirse ante el Servel o fusionarse con otras colectividades.
