El Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago acogió la solicitud de sobreseimiento de la abogada Jaqueline Stubing para terminar con la investigación formalizada en contra de 2 cuidadoras de trato directo del Cread Galvarino, el mismo centro donde murió Lissette Villa en 2016.

De esta forma, se decretó el sobreseimiento de Cintia Galaz y Orfelina Valdés, a quienes se les atribuía apremios ilegítimos a la menor, aunque en ocasiones anteriores al día en que murió.

En tanto, no se autorizó el sobreseimiento de Thiare Oyarce, a quien se le acusa de haber estado sujetando las piernas de la niña el día que falleció en el hogar dependiente del Sename.

La imputada, a la salida del centro de justicia, y en línea con lo señalado por su abogada, dijo que no contaban con todos los recursos para una adecuada protección de los menores, por lo que sólo hicieron lo que pudieron para cumplir con ello.

Lo anterior, enfocándose en el mismo punto señalado por las defensas, las cuales apuntaron a la responsabilidad del Estado más que a responsabilidades particulares.

Entre los argumentos presentados durante la jornada sobre ello, se apuntó a que un 70% de los niños ingresa con problemas psiquiátricos a los centros ligados a la institución.