Al menos unos 20 rehenes murieron tras un ataque a un restaurante en Dacca, capital de Bangladesh, en el que también perdieron la vida seis de los atacantes y dos policías, mientras otros 13 civiles fueron liberados, informaron fuentes internacionales, las cuales añadieron que el hecho fue realizado por grupos yihadistas.

Los hombres armados mataron a veinte extranjeros, la mayoría italianos y japoneses. La toma de rehenes culminó tras el asalto de las fuerzas de elite de Bangladés, que dieron muerte a seis secuestradores.

Los islamistas extremistas comenzaron durante las últimas horas el ataque en este restaurante ubicado en un barrio exclusivo de la capital de Bangladesh, frecuentado por diplomáticos y extranjeros, tomando a varios rehenes.

Tras el asalto de las fuerzas de seguridad, la primera ministra Sheij Hasina dijo que el país está “determinado a erradicar el terrorismo” en este país de mayoría musulmana. El gobierno niega que el EI esté presente en el país.

Los sobrevivientes contaron que los secuestradores separaron a los nacionales de los extranjeros antes de perpetrar los asesinatos, una matanza que terminó 11 horas más tarde con un asalto de las fuerzas de seguridad.

La mayoría de las víctimas fueron masacradas con armas blancas. Además, dos policías murieron el viernes en los combates contra los atacantes, que estaban fuertemente armados.

“Encontramos 20 cuerpos. La mayoría murieron brutalmente por armas cortopunzantes”, dijo el portavoz militar Nayeem Ashfaq Chowdhury.

Bangladesh está sumido desde hace meses en una serie de asesinatos de representantes de minorías religiosas, intelectuales y extranjeros, asesinatos de los que el gobierno acusa a grupos locales pero que fueron reivindicados por el EI o un brazo de Al Qaida.

Este ataque hace temer una expansión de estos dos grupos yihadistas en Bangladesh. “Es un acto odioso. ¿Qué clase de musulmanes son estas personas? No son de ninguna religión”, afirmó el Gobierno en entrevista televisiva.