Dirigentes del mundo empresarial aseguraron que la negociación colectiva de BancoEstado, que incluyó reajustes y un contundente bono por término de conflicto, es un precedente de lo que ocurrirá con la reforma laboral, donde los sindicatos fuertes “podrían empujar a las empresas a la quiebra”.

A los vaticinios de mayor desempleo y menor crecimiento económico como efectos de la reforma laboral, ahora se suman los “temores” por relaciones supuestamente desequilibradas y un eventual poder de los sindicatos que haría tambalear la solvencia de las empresas.

Los reajustes salariales y el bono de término de conflicto por 6,3 millones de pesos que lograron los trabajadores de BancoEstado, provocaron preocupación en el sector privado por el precedente que marcaría en futuras negociaciones, regladas ahora con una legislación laboral actualizada.

Según la Sociedad de Fomento Fabril, la reforma laboral elevaría la tasa de sindicalización a un 80 por ciento, lo que pondría en peligro a las compañías.

El argumento es que empresas privadas podrían quebrar si un sindicato único y con alta adhesión pide un bono excesivamente alto, como habría ocurrido en BancoEstado, que tuvo que recurrir al 91 por ciento de sus utilidades del primer semestre de este año para atender esa demanda.

Así lo manifestó el presidente de la Asociación de Bancos, Segismundo Schulin-Zeuthen, ex presidente de BancoEstado, quien sostuvo que en esa entidad se configuró una relación asimétrica, debido al poder del sindicato.

La postura de los grandes empresarios fue duramente criticada por el mundo sindical. El vocero de la Confederación de Sindicatos Bancarios, Luis Mesina, aseguró que es “una vergüenza” que el sector privado utilice la negociación colectiva de BancoEstado para acusar a los sindicatos de peligrosos.

El vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores, la CUT, Nolberto Díaz, acusó a los dirigentes empresariales de mentirle al país y sostuvo que lo realmente peligroso es el poder del empresariado que corrompe la política.

Según concordaron la CUT y los sindicatos bancarios, la negociación con sindicatos fuertes permite normas básicas para mejorar condiciones laborales y salariales de los trabajadores y no un supuesto peligro para las empresas.