La tecnóloga médica y especialista en radiología de la Universidad San Sebastián, Rosa Rojas, aconsejó realizarse una mamografía una vez al año para evitar complicaciones.

Un examen de este tipo reduce en un 30% la muerte por cáncer de seno, según un estudio realizado por científicos de la Universidad Queen Mary de Londres, a más de 130 mil mujeres durante 30 años y que fue publicado por la revista científica Radiology.

Rojas explicó que esta prueba consiste en una exploración diagnóstica de imagen por rayos X de la glándula mamaria y corresponde, tal como lo advierte la publicación británica, “en un adecuado procedimiento de prevención”.

“Durante el procedimiento se comprime la mama que está constituida por tejido adiposo, así se obtiene la mayor resolución posible en la visualización del tejido de la glándula mamaria”, dijo la radióloga Rosa Rojas.

“La compresión del tejido es un proceso breve de no más de 10 minutos que puede producir incomodidad, pero no necesariamente dolor, porque eso va a depender de qué tanta sensibilidad tenga la mujer en sus tejidos, dependiendo de la etapa de su ciclo”, agregó.

Este asunto no es menor, si se considera que en Chile esta patología ocupa el tercer lugar entre las causas de muerte por cáncer en la mujer.

La radióloga sostuvo que la edad promedio para realizar este examen es 40 años, con periocidad de uno o dos años, de acuerdo al diagnóstico de la paciente.

Mientras que mujeres de 30 años deben realizarse el examen en caso de contar con antecedentes familiares de cáncer de mamas o cáncer cervicouterino. Por otra parte, es aconsejable que mamás primerizas de 30 o más años también se lo practiquen.

Actualmente el examen se realiza con mamógrafos, pero también existen otras opciones de diagnóstico como la mamografía digital directa que detecta de mejor manera las microcalcificaciones. Otra alternativa es la resonancia magnética.

“Muchos pacientes prefieren hacerse este examen para evitar la mamografía tradicional, pero es menos exacta”, explicó Rojas.

La académica sugirió no aplicarse desodorante previo al examen, ya que “esos productos dejan cristales en la piel y provocan que se visualicen micro calcificaciones o que el examen resulte falso positivo”.

Por otra parte, es importante que la paciente tenga una actitud relajada al momento de hacerse la prueba y esté bien informada acerca de los detalles de su período menstrual, como por ejemplo a qué edad fue el primer ciclo.

“Estos antecedentes ayudarán en el resultado del examen”, comentó la tecnóloga médico.

La especialista recalcó que la mejor manera de prevenir estas patologías es a través del autoexamen mensual o técnicas de autopalpación mamaria que las pacientes se pueden practicar en su hogar y que sirve para detectar quistes u otros problemas de la zona.