El concejal Andrés Zarhi fue elegido como el nuevo alcalde de Ñuñoa, luego de que el otrora líder de aquella comuna, Pedro Sabat, presentara su renuncia.

Recordemos que la elección no estuvo exenta de polémica, ya que Sabat buscaba que su sucesor fuese Guido Benavides, pero no contó con la unanimidad de los concejales de su sector. Ambos pertenecen a Renovación Nacional.

La votación en el concejo municipal debió llegar a segunda vuelta, luego de que ninguno de los dos obtuviera la cantidad necesaria de sufragios en la primera, ya que Benavides logró 3 votos y Zarhi 2. En la segunda ronda, la cifra fue la misma, pero se impuso Zarhi por ser quien obtuvo más votos en las elecciones municipales de 2012.

Andrés Zarhi es un periodista conocido por trabajar durante años en Canal 13, quien luego decidió incursionar en política en el concejo municipal de Ñuñoa.

En sus primeras palabras tras asumir como alcalde, indicó que “es una responsabilidad distinta a la de concejal. Es un desafío muy importante, hay muchos temas que quiero abordar. Va a ser una linda labor, que (espero) me permita tener aspiraciones a una reelección en 2016″.

Sobre su cambio de opinión a la idea de ser alcalde, el jefe comunal comentó que en un principio tenía contemplado completar el periodo faltante de Sabat, pero que como la idea era dejar a alguien de proyección en el sillón alcaldicio, decidió no aspirar al cargo. Pero, tras recibir el apoyo de la gente cambió de opinión.

“Debido a múltiples llamados y reconocimientos a mi labor decidí proyectar este año y tres meses que quedan como alcalde y posteriormente el 2016 ir a la reelección. Por eso hubo un cambio, pero eso se lo comuniqué 24 horas después al alcalde”.

Zarhi aseguró que a los concejales les otorgará “mayor participación en todo lo que sea las bases de licitaciones, que no lleguen al consejo solamente para que las voten”.

En tanto, la diputada e hija del alcalde saliente, Marcela Sabat, opinó que la elección demostró que la Nueva Mayoría no tiene unidad ni candidato para pelear por el sillón que dejó su padre.

Pedro Sabat dejó la alcaldía para terminar de tratarse un cáncer a la tiroides, pero además con el interés de emprender una carrera parlamentaria en las elecciones de 2017.