Un informe preparado por un equipo especializado del Banco Mundial realizó un análisis y evaluación al principal medio de financiamiento de la educación universitaria en Chile. El Crédito con aval del Estado, pese a mejorar la accesibilidad, deja a los estudiantes con una deuda superior -en porcentaje del sueldo- en comparación a otros países, y además ha fomentado el crecimiento explosivo de casas de estudio ‘que no son de gran calidad’, según indica el documento.

El informe muestra que, en comparación a otros países, el nivel de intereses es muy alto, lo que queda demostrado en el momento que los ingresos anuales de quienes deben cancelar el crédito, supera en un 172% la deuda total que mantienen los estudiantes egresados.

Mientras tanto, países como Estados Unidos y Alemania alcanzan menos de la mitad de esta proporción con un 57% y 14% respectivamente.

El cálculo también fue hecho en relación al pago mensual del crédito, en donde nuestro país continúa representando uno de los porcentajes más altos del sueldo de los deudores, alcanzando el 18% de las remuneraciones en créditos a 15 años, mientras que para prestamos con 20 años de plazo alcanzaría el 15%, según indica el Banco Mundial.

Comparación nivel de deuda | Banco Mundial

Comparación nivel de deuda | Banco Mundial

Otro aspecto que revela el informe, dice relación con el bajo ingreso residual (sueldo con que cuentan una vez descontado el crédito) que disponen algunos trabajadores, acercándose a la cifra de $286.000 al mes (1.5 veces el sueldo mínimo), sin posibilidad de renegociar la deuda.

Por otra parte, la situación se agrava en el momento que el deudor haya desertado de otra carrera con anterioridad, también financiada con el CAE, ya que este alumno tendrá 2 créditos, que van aumentando en forma paralela, esperando el momento del pago.

Además, se cuestiona la sustentabilidad del programa, mostrando una morosidad del 45% en alumnos que desertan de sus carreras, y que además deciden no seguir estudiando, olvidando también cancelar su respectiva deuda. Mientras tanto, los morosos egresados y con plazo de gracia cumplido alcanzan el 30%.

Por lo que el hecho estaría fomentando el endeudamiento de los jóvenes, en lugar de lograr un mayor nivel de desarrollo en ellos.

Concentración de créditos

El aumento de las casas de estudio acreditadas es otro aspecto preocupante, ya que – según el BM- podría estar siendo fomentado por el CAE, lo que no necesariamente supone mejoras en la calidad de la educación en los distintos recintos académicos, ya que “Buscar la acreditación es ahora una práctica casi que estándar para las Instituciones en Chile”, aseguran.

Además, consideran que las distintas casas de educación superior deberían distribuirse el financiamiento de una manera más igualitaria, pero se encuentran grandes concentraciones de estudiantes con el beneficio en casas de estudio específicas, tal como lo muestra el gráfico.

Beneficiarios del CAE por instituciones | Banco Mundial

Beneficiarios del CAE por instituciones | Banco Mundial

El negocio de los bancos y las consecuencias para el Estado

Mientras tanto, a medida que el programa avanza, la cantidad de bancos que participan en el proceso ha aumentado ostensiblemente, pese a que requiere de muchos esfuerzos, puede llegar a ser muy lucrativo. Los Bancos han ganado cerca de US$500 millones de dólares desde que el plan entró en funcionamiento.

Primero cabe recalcar que los créditos tienen un alto costo, ya que las condiciones de crédito en Chile lo catalogan dentro de un marco de riego alto y peligroso, y no considera para esos efectos al Estado como un ente responsable.

Las entidades financieras una vez que otorgan los créditos, pactan una reventa de las deudas al Estado, para evitar una mayor alza de los intereses a un precio mayor, por lo que decidieron – en esta oportunidad- adquirir el 50% de la deuda en 2010.

Por lo anterior, el Banco Mundial aconseja buscar un formato que fomente el beneficio mutuo entre el Estado y la banca, que permita la sustentabilidad del actual sistema, ya que el Estado ha perdido cerca de US$ 2000 millones de dólares desde que se inició el programa.

Para finalizar, el informe recalca que “la estructura actual de subasta redunda en incentivos para las entidades financieras que son perversos” ya que se aprovecharían de las peores escenarios posibles para el Estado, como lo son las altas tasas de mora del sistema.

Revisa el completo informe del Banco Mundial aquí