El uso de cigarrillos electrónicos en Chile es una tendencia que ha ido en aumento en los últimos años. Sin ir más lejos, la encuesta de Consumo Juvenil de Tabaco de 2017 arrojó que el 13 por ciento de los escolares los prefería por sobre el cigarro hecho a base de tabaco.

Sin embargo, las propias entidades de salud en el mundo han alertado a la población sobre una situación bastante grave: las explosiones de los también denominados “vapeadores”. El último caso ocurrió en Estados Unidos meses atrás.

La víctima del cigarrillo electrónico fue un joven de 17 años llamado Austin Adams, quien vivió una pesadilla luego que el objeto estallara en su boca.

Según detalla la cadena CNN, el muchacho tuvo que realizar un viaje de 400 kilómetros entre Rural Ely y la ciudad de Saint Lake City, en busca de una solución. La explosión lo había dejado sin varios dientes y unja fractura en su mandíbula.

Haz click aquí para mostrar el contenido
New England Journal of Medicine
New England Journal of Medicine

Kailani Burton, madre del joven, explicó al citado medio que le habían recomendado comprar este tipo de dispositivos para frenar la adicción al tabaco que tenía su hijo. En su relato agregó que el elemento fue producido por la empresa VGOD.

“Ocurrió la explosión y Austin entró a la casa con la mano sobre la boca. Tenía mucha sangre y no podía hablar. Mi hijo estaba en shock en ese momento”, detalló.

Adams fue intervenido en el Hospital de Sant Lake City por la cirujana Katie Russell, quien a su vez relató el caso médico a la revista científica New England Journal of Medicine.

En ese momento, la cirujana confirmó que el joven tenía una fractura en la zona inferior izquierda de la mandíbula, a lo que se añadía que al menos tres piezas dentales habían resultado seriamente dañadas.

New England Journal of Medicine
New England Journal of Medicine

“El adolescente se sometió a una reducción abierta y fijación interna de la fractura, extracción dental y desbridamiento de tejido (eliminación del tejido muerto)”, apuntó Russell.

La profesional añadió que este no es el primer caso de explosión de un cigarro electrónico que llega a su hospital, por lo que llamó a la población a evitar su utilización.

“Las personas deben saber antes de comprar estos dispositivos que existe la posibilidad de que estallen en su bolsillo o en la cara”, concluyó.

De acuerdo a la revista científica, se estima que han existido cerca de 2.000 explosiones de vapeadores en Estados Unidos entre 2015 y 2018, las cuales pueden ser letales.

doodleroy | Pixabay (CCO)
doodleroy | Pixabay (CCO)

Un caso de fallecimiento ocurrió en el estado de Texas en febrero pasado y afectó a un hombre mayor de 40 años. En ese momento la explosión del cigarrillo dañó su arteria carótida (uno de los conductos principales que lleva sangre hacia el cerebro).

Aquel caso llevó a que a Agencia de Administración de Alimentos y Drogas en Estados Unidos (FDA) llevara a cabo una investigación para explicar por qué se producían las explosiones de estos implementos.

La principal conclusión de este trabajo determinó, en ese entonces, que los estallidos se producían por el sobrecalentamiento de las baterías de iones de litio.