Un doble triste momento fue lo que vivió una familia en Estados Unidos: perdió su casa y todo lo que había dentro en un incendio y, luego que desconocidos organizaran una colecta de dinero en beneficio, parte de lo recaudado les fue robado.
Según detalló el portal de Fox, donde el padre de familia Damien Micol oriundo de la ciudad de Plymouth, en el estado de Michigan, contó lo ocurrido.
El incendio, narró, comenzó unos días antes del 26 de noviembre, momento en que en el país norteamericano se celebra el Día de Acción de Gracias.
Micol estaba durmiendo junto a su esposa Allison y sus dos hijos, Noah (6) y Ryder (5) cuando empezaron las llamas. Presuntamente se trató de un siniestro provocado por fallas en la electricidad.
“Tuve que levantarme a las 5:30 de la mañana para ir a trabajar, mi esposa trató de apagar el fuego con las manos y se quemó las manos”, afirmó.
Más tarde, sólo se decidieron a dejar sus cosas y a “correr por la calle y hacer que alguien llamara al 911 -el número de emergencia-“. “Les dije que mi casa estaba en llamas”, agregó.
Si bien el fuego arrasó con la casa, una de las pertenencias que lamenta Micol son las cenizas de su suegro. “Mi esposa las perdió”, dijo. Y hasta su licencia de matrimonio resultó siniestrada.
El robo de GoFundMe
GoFundMe es una plataforma en la que usuarios de todo el mundo cuentan sus historias y, bajo el anonimato o entregando la identidad, personas pueden donar dinero voluntariamente. Una vecina de la familia creó una campaña en el sitio web y lograron reunir una gran cantidad.
Según contó Micol, fueron unos 6 mil dólares (4,3 millones de pesos chilenos, aproximadamente). Pero del total, sólo recibieron mil dólares. El resto, afirmó, desapareció.
Mientras pedían la suma, la persona a cargo siguió “entregando excusas”. Ellos, sin duda, contaban con el dinero para levantarse nuevamente. “No sé qué decir, pero llámalos basura”, lanzó.
Desde GoFundMe dijeron al medio, a través de un comunicado, que los equipos de seguridad están investigando y que “se han comunicado con el organizador para obtener más información para garantizar que los fondos lleguen al lugar correcto”.
“Lo más importante para nosotros es que los donantes estén protegidos, sus intenciones se respeten y que los destinatarios reciban los fondos recaudados en su nombre”, señalaron.
