Las dos mujeres fueron condenadas por los delitos de homicidio simple, ejercicio ilegal de la profesión de médico cirujano en concurso medial con uso malicioso de instrumento público falso y lesiones graves.

El Tercer Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a Teresa Elena Díaz Stevens y a su hija Mónica Teresa Flores Díaz, a 17 años de cárcel en calidad de autoras del homicidio de Leslie Vergara. Como también por los delitos de ejercicio ilegal de la profesión de médico cirujano en concurso medial con uso malicioso de instrumento público falso y lesiones graves.

Ilícitos que fueron cometidos entre 2017 y 2022, en la comuna de Las Condes. Donde se ubicaba la clínica clandestina que estas operaban junto a Jorge Mario Flores Díaz (otro hijo de Teresa Díaz).

Este último fue condenado a 818 días de reclusión más el pago de una multa a beneficio fiscal de 6 UTM, como autor del delito de ejercicio ilegal de la profesión de médico cirujano, cometido entre 2015 y 1 de febrero de 2022.

Además, los tres quedaron con accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras duren las condenas.

Clínica clandestina

La víctima, de 32 años, falleció tras realizarse una intervención quirúrgica, específicamente un aumento de glúteos con inyecciones de colágeno. Las condenadas “mediante una veno punción inyectan en su glúteo derecho una sustancia que correspondería a polidimetilsiloxano, también llamado silicona, la que finalmente y a los pocos minutos le genera la muerte”, indica el fallo.

En la causa, el tribunal decretó la absolución, por falta de acreditación, de Jorge Mario Flores Díaz de los cargos formulados en su contra por el Ministerio Público. Los que le atribuían autoría en los delitos de homicidio simple, obstrucción de la investigación y ejercicio ilegal de la profesión de médico cirujano en concurso medial con el delito de uso malicioso de instrumento público falso.

El tribunal dio por establecido que en el periodo de 2015 y 2022, los hermanos Flores Díaz y su madre, Teresa Díaz Stevens, “realizaban intervenciones o tratamientos para el aumento de los glúteos por medio de inyecciones con sustancias, que señalaban se trataba de ácido hialurónico o colágeno”. Sin embargo, “estos tratamientos provocaron reacciones adversas y problemas de salud en un gran número de víctimas”.