Duras críticas realizó el papá del cabo segundo David Florido, asesinado la semana pasada en Pedro Aguirre Cerda. Responsabilizó del hecho a los jueces que determinaron la libertad del único sospechoso del crimen y señaló que su hijo no le disparó para evitar cuestionamientos políticos.

Juan Carlos Florido, padre del cabo segundo David Florido, asesinado el pasado viernes afuera de una barbería en Pedro Aguirre Cerda, se refirió este jueves a la libertad del único sospechoso de cometer el crimen.

Se trata de J.G.Q., de 23 años, quien en diciembre dejó Colina 1 tras recibir la libertad condicional. Él cumplía una pena por robo con intimidación.

Según informó La Tercera, la Novena Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago determinó su libertad pese a un informe negativo de Gendarmería. La decisión tuvo el voto a favor de la ministra (S) Andrea Díaz-Muñoz Bagolini y el abogado integrante Eduardo Jequier Lehuedé. En tanto, el fiscal judicial Jorge Norambuena estuvo por mantenerlo en prisión.

Ante esta situación, Florido señaló que quienes dejaron en libertad a J.G.Q. son responsables de la muerte de su hijo.

“Yo responsabilizo a ese juez que dio un fallo en contra de lo que estaba diciendo Gendarmería… Si él hubiese votado a favor de ese informe, ese día en la peluquería no habría estado ese hombre y mi hijo estaría vivo… Es responsable de la muerte de mi hijo”, señaló al matinal Tu Día de Canal 13.

Junto con ello, señaló que “esa persona, ¿por qué le disparó a mi hijo? Porque como ya tenía antecedentes, él luchó por no caer detenido para no aumentar su pena”.

Agregó que si el sujeto, que es intensamente buscado, hubiese sido un delincuente común, no le habría disparado y se habría entregado porque “estos gallos se saben las leyes”.

“Carabineros con las manos amarradas”

Florido también tuvo palabras por la situación que vive Carabineros. Según dijo, su hijo no disparó contra quien le quitó la vida por “cuestionamientos políticos”.

“Me he sorprendido de mí mismo, porque me siento con la responsabilidad de ser la voz de mi hijo… Del momento en que mi hijo falleció, él no puede hablar y a lo mejor quería decir muchas cosas respecto a cómo trabajan en la calle”, expresó.

A renglón seguido, señaló que “Carabineros es una muy buena institución, prestigiosa, profesional, pero lamentablemente a Carabineros lo tienen con las manos amarradas”.

“Mi hijo debiera estar vivo. ¿Por qué mi hijo está muerto? Porque mi hijo se cuidó de los cuestionamientos políticos, lo que iban a decir los derechos humanos y montones de cosas (…) No podía perder su fuente trabajo. Y él, por cuestionamientos políticos, no hizo bien la pega. Y por no hacer bien la pega, mi hijo hoy está fallecido. Entonces, eso no puede ser”, argumentó.

Luego, señaló que “la policía tiene que tener todo el apoyo del Estado” y que “a mí no me sirve que la ministra (Izkia Siches) diga ‘estamos apoyando a Carabineros’. No, ese no es el apoyo. El apoyo es darle todas las instancias legales, en el sentido de que, en legítima defensa, Carabineros tiene que hacer uso de su armamento”.

“Si mi hijo iba persiguiendo un delincuente con un armamento en la mano, tenía que haber disparado. Por último, en una pierna o en un brazo, para que esta persona pudiera ser controlado. Mi hijo quería darle alcance, botarlo, asegurarlo, pero nunca haciendo uso de su arma. Y resulta que esta persona llevaba seis meses (libre)”, declaró.