Una serie de llamados a realizar evasiones masivas en el Metro de Santiago han marcado las jornadas de esta semana en la capital. Debido a esto, varias estaciones han debido permanecer cerradas y sin tener detención de trenes.

Las convocatorias a evadir el Metro han sido llamadas principalmente por los estudiantes secundarios, quienes iniciaron las manifestaciones a los pocos días que se diera a conocer un alza de $30 en el sistema de transporte público capitalino.

Esta alza en el pasaje es determinado por un Panel de Expertos que asesora al Ministerio de Transportes y que junta todos los meses a analizar una serie de variables para determinar cuándo volverá a subir la tarifa.

En conversación con La Tercera, Juan Enrique Coeymans, presidente del Panel de Expertos del Transporte Público aseguró que no está de acuerdo con el fondo de las manifestaciones.

“No estoy de acuerdo, porque cuando suben los tomates, el pan, todas las cosas, no hacen ninguna protesta”, señaló.

Sumado a esto, comentó que “creo que hay un sesgo, porque lo único que han resaltado es que subió la hora punta, pero se olvidaron de que se amplió la zona baja y se eliminó la zona valle de la mañana, lo que permite que mucha gente de bajos ingresos, que generalmente sale muy temprano para llegar a sus lugares de trabajo, puede viajar por $ 640”.

“Los estudiantes están alegando y resulta que su tarifa no varió ni un peso. Los buses subieron $10 y están alegando, pero cuando suben al doble los buses interurbanos nadie dice nada ni ocurren protestas de evasión. Es muy curioso todo esto, yo creo que en esto hay un manejo político”, aseguró.

Además, mencionó que para los próximos meses no se puede descartar una nueva alza en el sistema de transporte público. “Nosotros no tenemos dominio sobre las variables. El índice tarifario tiene relación con la manera cómo van a variar los insumos. ¿Cómo vamos a saber si va a variar el combustible o el dolar? En los próximos meses creo que no, pero puede suceder”, explicó.

“Si se empiezan a arreglar las cosas entre China y Estados Unidos van a variar los valores del dólar y el combustible. Se van a producir cosas que posiblemente lleven a que no haya alza hasta unos seis o 10 meses más”, añadió.