Los familiares de dos muertos en Linares, el estudiante de 14 años Cristóbal Lobos y la funcionaria municipal de 28 años Catherine Vásquez, llegaron hasta la Fiscalía de la ciudad para exigir justicia por sus casos.
Ambos grupos de parientes se encuentran inconformes por las gestiones investigativas respecto a los fallecidos y pidieron la intervención del ministro de Justicia y ex Senador por el Maule, Hernán Larraín.
Por dicha razón, alrededor de 50 personas se manifestaron en la ciudad, donde solicitaron que ambas causas sean judicializadas y expresaron reparos a la labor que lleva adelante la fiscal jefe, Carola D’Agostini.
Los casos
El joven Cristóbal Lobos, alumno de primero medio del Liceo Diego Portales, estuvo desaparecido desde el 9 de junio de este año, luego de ir al río Achibueno a cazar conejos junto a un amigo.
Se reportó que el adolescente trepó un árbol y resbaló. Su acompañante avisó a familiares, quienes comenzaron con la búsqueda del joven y encontraron su cuerpo en el lugar, 22 días después desde que se perdió su rastro.
Por otro lado, el caso de Catherine Vásquez, “Catita” como es llamada por sus cercanos, mantuvo en intriga a Linares desde su desaparición en 2018.
Ella trabajaba en el Departamento de Tránsito del municipio de la ciudad y el 29 de mayo de 2018 su cuerpo fue encontrado colgando de una rama, en un fundo del sector La Aguada de la comuna de Longaví, a metros de la casa de su expareja.
A partir de ese momento, su familia, en particular su hermano Camilo Muñoz, realizaron indagatorias privadas que dieron cuenta de la participación de terceras personas en el hecho.
Las gestiones fueron motivadas por los parientes de la mujer, ante la inconformidad que les generó la versión que calificó el hecho como suicidio por parte de la Fiscalía y de la Brigada de Homicidios de Linares, la que -en medio de controversias- dejó de estar a cargo del caso.
Recientemente, la indignación de su familia se vio aumentada ante la decisión de no perseverar en el caso, emanada desde el Ministerio Público.
María del Rosario Muñoz, madre de “Catita”, expresó que “para nosotros las diligencias no están agotadas. No se realizaron una serie de pesquisas que nosotros planteamos en las querellas. Cerrar el caso es de una tremenda injusticia y representa gran dolor para nuestra familia”.
También sostuvo que, confiando en el sistema judicial, desde el comienzo obedecieron las instrucciones y sugerencias que les dio la fiscal D’Agostini.
“Por mucho tiempo nos mantuvimos en silencio. Hoy exijo justicia por la muerte de mi hija y la intervención de las autoridades. Espero que el ministro de Justicia, Hernán Larraín, tenga la sensibilidad y como ex parlamentario por la zona, durante muchos años, intervenga en este caso y otros, como el de propio Cristóbal Lobos“, añadió Muñoz.
Por su parte, Viviana Lobos, hermana de Cristóbal, indicó no comprender por qué la Fiscalía no formaliza la investigación contra un sospechoso, luego que surgió un antecedente que acreditaría la intervención de terceras personas en la muerte del joven.
“Ella misma -la fiscal- nos señaló que mi hermano tenía tres golpes atribuibles a terceras personas”, enfatizó.
Lobos exigió que el Gobierno y los parlamentarios intervengan en esta materia, dado que “hay una sensación de impunidad generalizada en la comuna de Linares. Nosotros queremos el cambio de fiscal”.
Por su parte, desde el Departamento de Comunicaciones de la Fiscalía Regional se indicó que “en torno a ambos hechos no se han tomado decisiones finales. En el caso del menor (Cristóbal Lobos) existen diligencias pendientes”.
