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Con la llegada del invierno, el frío se filtra por puertas y ventanas, aumentando el consumo de calefacción y los costos energéticos. Una solución económica y eficaz para aislar tu hogar es el burlete, con opciones desde $3.000 a $10.000, que bloquea el frío y el ruido. Expertos recomiendan su uso, destacando que puede ahorrar hasta un 40% de energía y brindar protección por ocho años. La instalación es sencilla y rápida, limpiando el área, retirando el burlete antiguo, midiendo y cortando el nuevo, y finalmente colocándolo en el marco de la ventana. Una medida práctica y accesible para mantener tu hogar cálido y confortable durante el invierno.

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Con la llegada del invierno, el frío comienza a colarse por las rendijas de puertas y ventanas, elevando el consumo de calefacción y, por consiguiente, los costos energéticos, sin embargo, existen una alternativa simple, sencilla y barata que puede ayudarte a aislar tu hogar, el burlete.

Dependiendo de las medidas de tus ventas o ventanales, puedes asilar tu casa o departamento con un presupuesto menor a $10.000.

¿Qué tan necesario es aislar tu hogar en invierno?

Al respecto, María Luisa del Campo, académica de la Escuela de Ingeniería Civil en Obras Civiles de la Universidad de Talca y experta en eficiencia energética, explicó a La Tercera que “una casa mantiene su temperatura según la capacidad que tengan los elementos que la conforman de conservarla”.

Así, durante el día, el calor se acumula en elementos propios del hogar como paredes, pisos, muebles, alfombras y cortinas. Aprovechar y mantener esta acumulación es clave, para lo cual existen opciones costosas, como ventanas termopanel.

Pero, por otro lado, la experta incluye otras alternativas bastante económicas, como cortinas de doble forro o persianas exteriores. Pero una parece ser la solución para la aislación térmica en tu casa o departamento, los burletes.

El papel de los burletes en la aislación térmica

Los burletes, tiras de tela o goma surgen como una alternativa destacable, que bloquea eficazmente el paso del frío. Son fáciles de comprar, su instalación es sencilla y además ayuda a bloquear el ruido externo.

En el mercado hay variadas alternativas, para puertas, ventanas o ventanales, además de diferentes tamaños, materiales y precios, los que van desde poco más de $3.000 hasta poco más de $10.000 según el metraje.

Algunas de las marcas de burlete que más se repiten en tiendas de retail en Chile, afirman que tienen un ahorro energético de hasta un 40% y una protección durante ocho años.

¿Cómo instalar un burlete para aislar el frío de tu hogar?

La instalación de un burlete es rápido, afirman desde el medio, Para ello, sugieren primero limpiar bien el área para eliminar polvo, que a veces evita adherencias y retirar los aislantes antiguos, que se vencen y suelen permitir el paso del frío.

1. Preparación: Antes de comenzar, asegúrate de tener un burlete nuevo que sea adecuado para tu ventana.

2. Retirar el burlete antiguo: Abre la ventana y localiza el burlete viejo. Este suele estar pegado en el marco de la ventana. Con cuidado, empieza a despegarlo desde un extremo. Si está muy adherido, puedes ayudarte con una espátula para levantarlo sin dañar el marco.

3. Limpiar el marco: Una vez retirado el burlete antiguo, limpia bien el marco de la ventana. Elimina cualquier residuo de pegamento, polvo o suciedad con un paño humedecido en alcohol o un limpiador específico. Deja que se seque completamente.

4. Medir y cortar el nuevo burlete: Mide el perímetro del marco de la ventana donde irá el nuevo burlete. Corta las tiras del burlete nuevo a la medida necesaria, dejando un par de centímetros extra para asegurarte de que cubra completamente el espacio.

5. Instalar el nuevo burlete: Quita el protector del adhesivo del burlete nuevo (si lo tiene) y comienza a pegarlo en el marco, empezando por una esquina y avanzando cuidadosamente para evitar burbujas de aire. Presiona firmemente para asegurar una buena adhesión.

6. Revisar y ajustar: Una vez instalado el burlete en todo el marco, cierra la ventana para comprobar que el sellado es correcto y que no hay corrientes de aire. Si es necesario, ajusta el burlete recortando o añadiendo más material.