El sistema frontal que golpeó con fuerza el fin de semana a la región del Bío Bío, se alejó dejando más de 500 afectados, 77 personas damnificadas y cerca de 15.000 clientes que este lunes seguían sin energía eléctrica.
Las empresas Frontel, CGE y Copelec, trabajan en diferentes puntos de la zona para lograr lo antes posible la reposición de las personas afectadas.
Desde la Superintendencia de Electricidad y Combustibles monitorean el avance de la situación pues todas las compañías se comprometieron a tener este lunes repuesto el suministro, lo que fue comentando por el intendente, Rodrigo Diaz.
En la región, el punto más álgido de clientes sin luz se registró el domingo, llegando a los 60.488 clientes sin electricidad.
A las 09:00 horas de este lunes, según el monitoreo de la SEC, el número de hogares sin suministro llegaba a los 12.000.
El frente dejó en Concepción cerca de 50 milímetros de lluvia y vientos de más de 100 kilómetros por hora, cuyas ráfagas botaron cientos de árboles.
El agua causó escurrimientos de tierra y anegamientos en decenas de poblaciones de diversas comunas. Más de 500 afectados en toda la región, medio centenar de damnificados se contabilizan sólo en la comuna de Arauco, 13 personas albergadas en Lota y Contulmo, y 19 viviendas con daño mayor.
El último balance de la Onemi mantiene la alerta amarilla vigente desde el sábado, aunque es probable que sea desactivada en las próximas horas por la mejora en la condiciones del tiempo.
La directora regional de la Onemi, Gilda Grandón, hizo un positivo recuento del funcionamiento del sistema de protección civil, teniendo en cuenta la intensidad del evento.
La preocupación más importante de la jornada del domingo fue el nivel de los ríos Butamalal en Cañete y Curanilahue en la misma comuna, lo que llevó a declarar dos alertas rojas que ya durante la noche fueron desactivadas al bajar el caudal de ambos y alejarse el riesgo de desborde.
Hasta el viernes no hay pronóstico de nuevas precipitaciones en la zona, aunque serían de carácter débil.
