Las autoridades descartaron algún error en la planificación y ejecución de las obras de mitigación tras el nuevo socavón que obligó a evacuar un segundo edificio en el sector de Reñaca, en Viña del Mar. Atribuyen lo ocurrido a las "lluvias extraordinarias" que se registraron en la zona.
Autoridades de Gobierno atribuyeron a las “lluvias extraordinarias” el colapso de obras de mitigación tras un nuevo socavón registrado en el sector de Cochoa y que obligó a evacuar a cerca de 200 personas del edificio Miramar en Viña del Mar, en la región de Valparaíso.
Los trabajos surgieron tras el primer socavón que mantiene en riesgo de colapso al edificio Kandinsky, actualmente sin moradores a causa del peligro para los residentes.
Las intensas precipitaciones registradas durante la madrugada, donde cayeron 8 milímetros de agua en cerca 40 minutos, terminaron por destruir el desagüe de agua construido de emergencia.
Autoridades atribuyen nuevo socavón a “lluvias extraordinarias”
La delegada presidencial de la región de Valparaíso, Sofía González, atribuyó el colapso de las obras de mitigación a “un evento de lluvias que es de carácter extraordinario. Cayeron 8 milímetros en 30 minutos y eso es algo que sucede una vez cada diez años, por tanto, el daño y las distintas afectaciones que se puedan dar a un suelo que ya está erosionado, fue bastante significativo”.
La autoridad aseveró que las razones tras el nuevo socavón es algo que siguen evaluando los equipos especializados, aunque insistió que “las primeras impresiones están en que una lluvia extraordinaria, más un suelo que ya estaba erosionado, se generaron algunas dificultades en la parte baja de la duna que fueron subiendo en la medida que llovía y eso genera un segundo socavón”.
“Existían obras de mitigación para evitar que el socavón siguiera ampliándose, lo que fue superado por una lluvia extraordinaria. Hace 10 años que algo como esto no ocurría”, insistió González y añadió que “de acuerdo a la información que me han entregado los técnicos hasta este momento, lo que sucede es que ante una lluvia extraordinaria y un suelo que ya estaba erosionado, la obra colapsa producto de este movimiento de tierra que comienza en la parte baja de la duna”.
El seremi de Obras Públicas, Yanino Riquelme, reforzó la explicación de la delegada indicando que “la solución que dimos para una condición normal de lluvia resultó bien, la lluvia de una semana atrás funcionó bien, el problema es que esta lluvia extraordinaria generó este colapso”.
“Nosotros generamos una obra provisoria para una condición normal, para una condición de emergencia, pero lo que vemos es que ayer la condición de lluvia no aguantó y generó un nuevo colapso”, agregó y descartó una mala ejecución de los trabajos.
Como el daño ahora es mayor, González informó que deberán reevaluar las obras que estaba realizado el Ministerio de Obras Públicas.
