Solicitan obligar a las empresas sanitarias a contar con seguridad y vigilancia permanente en el proceso de producción del agua potable.

Lo anterior, a raíz de los hechos ocurridos en las comunas de Osorno y Puerto Octay, que se vieron privadas del servicio producto de la contaminación con hidrocarburo en sus procesos.

Y se trata de una moción presentada por el diputado por el distrito 25, Harry Jürgensen, que busca obligar a las empresas – que se dedican a la distribución de agua potable – a contar con seguridad, protección y vigilancia permanente en sus plantas de tratamiento.

Según aseguró el legislador, lo que se busca es “prevenir la acción de terceros ya sea voluntaria o involuntariamente que pueda interrumpir un servicio público básico fundamental como lo es el agua potable”.

Asimismo, el parlamentario explicó que los perjuicios sufridos por los habitantes de Osorno y Puerto Octay, se podían haber evitado de haber sido más rigurosos en su proceso, asegurando que se debe prevenir que las plantas productoras de agua potable se transformen en un blanco de atentados.

Finalmente manifestó que, debido a la precariedad con la que operan muchas plantas, debe ser imperante abordar los sistemas de vigilancia o de seguridad, destacando incluso los peligros que se presentan, donde en muchos casos no cuentan con un cierre perimetral adecuado.