Continúa el trabajo entre representantes de los pueblos originarios y los entes gubernamentales de Salud, con tal de materializar los acuerdos que vienen a incorporar las prácticas ancestrales con la medicina occidental.

En Santiago se realizaron las jornadas de diálogos donde se sometió a discusión el reglamento que establece el derecho de las personas pertenecientes a pueblos originarios a recibir atención médica con pertinencia cultural, instancia cuyo cierre contó con la presencia de representantes de pueblos originarios incluso de la provincia de Osorno.

Uno de los puntos tratados, tiene directa relación con lo vivido semanas atrás donde una familia Huilliche se negó a inocular contra la tuberculosis a su recién nacida, toda vez que iba en contra de las creencias de su pueblo. A esto se sumaba la afectación de su linaje, considerando que descendía de machis por lo que posiblemente tendría que perpetuar el trabajo.

La encargada de del Programa Especial de Salud de Pueblos Indígenas (Pespi), Soledad Troncoso, dijo que tal inquietud fue acogida por lo que esperan que sea incorporada en el artículo 3 del citado reglamento.

De esta forma, se espera tener noticias al respecto ya que, tal cual como han planteado en más de una oportunidad las autoridades ancestrales del Futahuillimapu, si bien se ha trabajado en la integración, es hora que tales adecuaciones se incorporen de forma real.

Además espera que esto se respete y deje de verse involucrados en líos judiciales, si alguno de los miembros se niega a recibir la atención médica occidental por priorizar la de su pueblo originario.