La decisión de Chile no sumarse al Pacto Migratorio Mundial, impulsado por la ONU y firmado ayer lunes en Marruecos, generó gran controversia, incluso la medida fue calificada como “vergonzosa” desde la oposición.

Ante esta situación, fue el propio presidente Sebastián Piñera quien salió a defender la determinación, y aunque reconoció que el texto no es vinculante, de todas formas implica una amenaza a la soberanía nacional, porque genera una serie de compromisos para el Estado de Chile que podrían perjudicar en eventuales juicios internacionales.

Por ello, el presidente del Senado, Carlos Montes, reclamó a La Moneda que la política internacional es un asunto de Estado, que trasciende a los gobiernos de turno y calificó como una vergüenza la ausencia en la firma del acuerdo de Marrakesh.

Lo anterior, también generó un nuevo cuestionamiento a la gestión del canciller Roberto Ampuero, toda vez que aparece marginado de una decisión que parece haber sido adoptada en el Ministerio del Interior.

Por esta razón, el secretario de Estado deberá explicar ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado la razón por la cual Chile se marginó de este acuerdo.

“Chile ha suscrito la declaración universal de Derechos Humanos y la Convención para la protección de los derechos de los trabajadores migrantes y sus familias”, manifestó ayer lunes, explicando que con eso se cautelan los derechos.

Y si bien aseguró que cada migrante tiene derecho a salir de su país, recalcó que “cada país tiene derecho, y es soberano también, de fijar sus propias reglas de migración”.

Crítica de Bachelet

La adopción de la iniciativa fue celebrada por la alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet.

“Agradezco a los Estados miembros de la ONU por adoptar el pacto mundial sobre la migración en el Día de los Derechos Humanos”, manifestó a través de Twitter.

Asimismo, deslizó una crítica hacia Chile. “Los migrantes tienen los mismos derechos humanos, como cualquier persona #ADefenderLosDerechosHumanos”, dijo, añadiendo que “el pacto es un compromiso poderoso para proteger los Derechos Humanos de todos los migrantes, en todas partes”.

¿Hay contradicción en Piñera?

El 27 de septiembre, en la Asamblea General de la ONU, el presidente Piñera dio un importante espacio a la migración en su discurso.

“…el compromiso de mi país, Chile, es claro y categórico: estamos generando una política migratoria que sea segura, ordenada y regular, en perfecta armonía con la declaración de Nueva York y el Pacto Mundial para la Migración, que plantea precisamente la necesidad de establecer políticas migratorias que garanticen migraciones seguras, ordenadas y regulares”, manifestó en esa oportunidad.

“Queremos recibir y acoger a todos aquellos que vienen a Chile a iniciar una nueva y mejor vida, que lo hacen respetando nuestras leyes, que se comprometen con el desarrollo del país y se integran nuestra sociedad”, añadió.

Pese a sus dichos en ese entonces, se determinó no adherir al pacto de la ONU.