Pasadas las 11:00 horas, recién comenzando la primera Cuenta Pública de su segundo mandato, el presidente Sebastián Piñera dijo la que sería la primera “piñericosa” de esta jornada.

“Hace poco más de 100 años, el 12 de octubre de 1818, cuando los clarines en los campos de batalla aún llamaban a los patriotas al combate para consolidar nuestra libertad e independencia, Bernardo O’Higgins escribió estas palabras: ‘Queremos, podemos, luego, debemos ser libres” inició.

Este fue en parte un error del mandatario al momento de leer el teleprompter, pues el texto de su discurso decía claramente “hace poco más de 200 años, el 12 de febrero de 1818”.

El 12 de octubre, por otro lado, es el “Día de la Raza”, que apunta a la fecha de la llegada de Cristobal Colón a América en 1492.

No sería el único problema que tendría con el telepromter, pues más tarde protagonizó un segundo chascarro.

Cuando acababa de hablar sobre las reformas en el área de la salud y comenzaba a hablar sobre el programa Elige Vivir Sano, aparentemente su telepromter se paralizó, por lo que debió improvisar sus comentarios respecto de este proyecto.

Posteriormente, intentaría avanzar hacia el siguiente punto en la tabla (las pensiones), diciendo que “vamos a hacer un gran esfuerzo para poder avanzar… y que avance también el teleprompter”.

Tras esto, siguió su improvisación, diciendo que buscarán “avanzar hacia pensiones dignas para nuestros compatriotas, y también, porque no solamente de pan vive el hombre, para una mejor calidad de vida de nuestros adultos mayores”.

Consciente de su fama, el Presidente en otro momento se apartó del libreto para clarificar cuando hablaba sobre políticas para la vejez, destacando “el plan adulto mejor, y no me he equivocado: adulto mejor”.

Este último proyecto, en efecto, forma parte de su programa de Gobierno.

Salida de libreto que salió mejor que otra en la que se refería a los proyectos para la infancia, respecto de las que dijo que “la inspiración de los niños fue algo muy inspirador”, cuando en su texto original dictaba que “quizás en esta actitud los niños hicieron el milagro”.