El soldado Travis King, un especialista en reconocimiento y explorador de Caballería en la Primera División Acorazada, estaba en el ejército desde enero del 2021, tuvo un par de problemas de conducta dentro de las FFAA estadounidenses y -por motivos que aún se desconocen- habría entrado de manera ilegal en territorio norcoreano. Tras 71 días de incertidumbre, hoy Travis volvió a su país.

El soldado Travis King llegó a EEUU tras ser deportado a China desde Corea del Norte, país al que había entrado de forma irregular en julio a través de la frontera con el Sur.

Con la mediación de Suecia, el régimen norcoreano expulsó al soldado estadounidense y lo envió a la ciudad fronteriza china de Dandong, donde fue puesto bajo custodia de Estados Unidos.

Posteriormente, fue trasladado a la ciudad de Shenyang, también en China, desde donde fue llevado en avión a la base militar estadounidense de Osan, en Corea del Sur·

El soldado, que estuvo cerca de 70 días en “territorio enemigo”, aterrizó en San Antonio, Texas, según lo informó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.

King (23) cruzó por sorpresa el pasado 18 de julio la Línea de Demarcación Militar entre las dos Coreas y entró sin permiso en territorio norcoreano.

Específicamente, allá estuvo detenido por 71 días.

Travis King volvió a casa

El soldado, que prestaba servicio en Corea del Sur, iba a ser repatriado a Estados Unidos como medida disciplinaria por sus problemas con la Justicia surcoreana.

Pese a esto, escapó a Corea del Norte donde -según Pionyang- pidió un asilo que le fue denegado, como lo detalló Agencia EFE.

Una vez en suelo estadounidense, King pasará una evaluación médica y psicológica para un “proceso de reintegración” informaron altos cargos de Estados Unidos.

El Gobierno estadounidense expresó su agradecimiento a Suecia, país que cuenta con una embajada en Pionyang, por haber sido el “principal intermediario” entre Estados Unidos y Corea del Norte durante este proceso.

China, por su parte, desempeñó “un papel muy constructivo al facilitar su traslado” fuera de Corea del Norte, pero no participó en tareas de mediación.

El régimen de Kim Jong-un anunció la deportación del soldado tras concluir una investigación del caso sobre la que no se han aportado mayores detalles.

Durante las pesquisas “Travis King confesó que entró ilegalmente” en Corea del Norte. Lo anterior, “porque albergaba resentimientos contra el maltrato inhumano y la discriminación racial dentro del ejército estadounidense”, dijo la agencia estatal norcoreana KCNA.

Sin embargo, altos funcionarios estadounidenses afirmaron este miércoles que King “está muy feliz de regresar a casa y de reunirse de nuevo con su familia”.

Dificultades con el régimen de Pyongyang

Desde que el soldado ingresó en territorio norcoreano, Pionyang tardó un mes en confirmar públicamente su detención.

Desde Corea del Norte se aseguró además que el soldado estadounidense había expresado “su deseo de pedir asilo” allí o en un tercer país.

Durante ese tiempo, Estados Unidos admitió dificultades para contactar con el Gobierno norcoreano, con el que no tiene relaciones diplomáticas.

Antes de huir a Corea del Norte, King había pasado 48 días en una institución penitenciaria de Corea del Sur.

Esto, debido a que no pagó la multa que se le impuso en febrero por un incidente con la Policía en Seúl -pateó un coche policial en esta ciudad-.

El soldado iba a ser devuelto a Estados unidos pero escapó del aeropuerto de Seúl, donde debía tomar el vuelo a casa, según informó el Pentágono tras el incidente.