La actriz volvió a defender al cineasta culpable de casos de abuso sexual. A más de un año del fallo, la mano derecha del director de cine aseguró que hubo irregularidades en el juicio y varias "prácticas gansteriles" que buscaban acallarla.

A comienzos del año pasado, el cineasta chileno Nicolás López fue encontrado culpable de haber cometido el delito de abuso sexual consumado, todo esto luego de que al menos ocho actrices lo acusaran de haber tenido comportamientos de índole sexual contra ellas sin su consentimiento.

Sin embargo, desde que el caso salió a la luz, su amiga y esposa de su mano derecha, Miguel Asensio, la también actriz Paz Bascuñan ha defendido al director de cine en varias ocasiones. Y a casi dos años del fallo legal, la protagonista de “Sin filtro” ha insistido en sus argumentos en favor a López.

En un reciente entrevista con Radio Futuro, la actriz nacional aseguró: “Fue un juicio con muchas irregularidades y tuve el sentimiento de no querer perjudicar a nadie, pero dije lo que pensaba”, comenzó diciendo.

A lo que agregó: “Hay algunas prácticas que a mi juicio fueron gansteriles, en el sentido de la manera de atemorizar a las personas que pensaban distinto, de acallarlas, me parece que el juicio público fue desproporcionado”, declaró.

Pero sus palabras no quedaron ahí, puesto que Paz Bascuñan también se refirió al estado de Nicolás López: “Esa persona quedó liquidada y a los que dimos nuestra opinión también. Yo nunca he estado a favor y he sido cómplice de un abuso, un maltrato. Soy la primera que levanta el dedo, entonces esa calma que tengo me permite opinar desde una libertad mayor”, aseguró.

La ex actriz de Mega también se refirió a la posibilidad de volver a trabajar de la mano de López, lo que no negó, pero sí condicionó: “Creo que él debe evaluar el tipo de persona en el que se ha convertido. Cada experiencia por dura que sea se agradece, te aporta como ser humano y confío que sea su caso”, dijo.

Cabe recordar que luego de que la defensa del cineasta presentara un recurso de nulidad, la Corte Suprema acogió la instancia y la condena a dos penas de 3 años y un día de presidio, las que actualmente cumple en libertad vigilada intensiva.