Primero fue Pastas Suazo. Luego Iansa. A ellos se suma ahora Clínica del Maule, en Talca, que el viernes pasado ingresó una solicitud de acuerdo de reorganización judicial.

El más importante centro hospitalario de esa región enfrenta una compleja situación financiera luego de 33 años de historia.

La clínica, que ofrece cobertura en todas las especialidades médicas, acumula deudas por más de 7.000 millones de pesos entre su deuda previsional y tributaria, de modo que sólo 5.360 millones de pesos quedan afectos al acuerdo.

De acuerdo a La Tercera, los mayores acreedores son Banco BCI ($1.308 millones), Banco Santander ($1.233 millones) y Clinical Market S.A ($117 millones).

“La situación financiera de Sociedad Clínica del Maule se inicia por una baja en la actividad en los períodos 2013 y 2014 producto de la salida de todos los convenios generados con instituciones gubernamentales que acudieron a esta institución producto de los problemas generados por el terremoto del año 2010”, destacó la compañía en su presentación al Primer Juzgado Civil de Talca.

Para atender esa demanda contrataron gran cantidad de personal. Pero ese aumento no se ajustó a la realidad en 2014 y 2015. Ahí comenzó la debacle y las perdidas. En tanto, la situación se agravó en 2017 y 2018, lo que derivó en el complejo escenario actual.