Antes del coronavirus el mundo estaba cambiando rápidamente en cuanto a la aplicación de las nuevas tecnologías, y no sólo en términos empresariales, sino que también en el día a día. La llegada de la pandemia aceleró este proceso de forma exponencial.
Es que luego de pasar un año encerrados, el mundo debió adaptarse a esta nueva realidad, donde ya las citas médicas no necesariamente deben ser presenciales; las oficinas se pueden encontrar en nuestras casas y los negocios online se convirtieron en esenciales.
A pesar de los desafíos que enfrentamos ante esta emergencia sanitaria, también ha sido una oportunidad para aprender de los beneficios de la tecnología y cómo puede facilitar la vida.
La telemedicina, por ejemplo, permitió que millones de personas no tuviese que exponerse a un posible contagio al ir a un centro médico por casos que no eran realmente urgentes. También logró que el sistema fuera más expedito y demostró que la inversión en este tipo de tecnología puede ayudar a mejorar los tiempos de atención.
Pasar más tiempo en casa también permitió conocer mejor y sacar más provecho a algunos aparatos tecnológicos que antes sólo eran parte de la entretención, y demostró la necesidad de tener conexiones estables de internet en el hogar.
Asimismo, el teletrabjo y las clases online, dejaron de manifiesto la importancia de la inversión en nuevas tecnologías de parte de las empresas y establecimientos, ya que sólo así podrán enfrentarse a la transformación digital que estamos viviendo.
“La gestión de la Tecnología de la información en forma externa asegura que todos los procesos sean realizados correctamente, entregando un valor adicional a la empresa. Además, permite a una organización optimizar los recursos y la dotación de personal, mejorando los procesos de negocio y de comunicación”, asegura Matias Corrales, Ceo de Kolossus Chile.
Venta Online
Por supuesto, uno de los principales cambios se vivieron en las ventas online, que crecieron exponencialmente. Lo que creó un doble desafío tanto para vendedores como para clientes.
Problemas en las plataformas, servicio post venta y sobre todo, logística, son elementos que pronto los clientes no perdonarán, quienes a su vez deben seguir aprendiendo sobre ciberseguridad, para evitar robos y estafas.
“La ciberseguridad llegó a su punto crítico: ya no es posible esquivar el tema. En la actualidad las compañías deben dedicar sus recursos para tener un diagnóstico claro sobre su infraestructura en materia de seguridad, pues los puntos de contacto se multiplicaron, y es preciso que conozcan la brecha entre lo que lo que poseen y lo que necesitan”, explicó un artículo de la revista Forbes.
Pero mientras los beneficios pueden ser muchos, los peligros también, especialmente en el ámbito de la información. Basta recordar con la gran cantidad de Fake News que comenzaron a circular en redes sociales y blogs en torno al virus y las vacunas.
Es por eso que resulta relevante siempre acudir a fuentes confiables y no creer todo lo que se lee, además de limitar el tiempo en internet, a lo que sea sólo necesario.
