El número uno de la música en línea, el sueco Spotify, anunció el jueves que ya tiene 140 millones de usuarios y que su volumen de negocios aumentó, pero sigue sin dar beneficios.
Las cuentas anuales de la marca, con sede en Luxemburgo, muestran un aumento del 53% de su volumen de negocios en 2016, hasta 2.900 millones de euros. En 2015 el crecimiento del volumen de negocios fue del 80%.
En cambio, la pérdida neta aumentó más de dos veces respecto al año pasado, con 539 millones de euros. Desde su creación en 2008, Spotify nunca ha logrado un beneficio neto.
Y otro dato que llama la atención, es que de sus 140 millones de seguidores, menos de un tercio (48 millones) pagan un abono.
Spotify ya está disponible en 60 países y planea su próximo desembarco en Japón, el segundo mercado musical del mundo.
A finales de mayo, la compañía logró un acuerdo con importantes artistas en Estados Unidos, clave para la difusión de sus obras sin problemas de propiedad intelectual, y en abril también firmó un contrato con Universal.
Muy por detrás de Spotify aparecen Apple Music, que en diciembre anunció 20 millones de abonados, y luego la francesa Deezer.