Hace pocos días, la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de los Estados Unidos (CPSC) ha confirmado la primera muerte oficial a raíz de la falla de un hoverboard (aerotabla o patineta eléctrica) informa CNN.
Se trata de una niña de 3 años que falleció a partir de un incendio provocado por la explosión sorpresiva de un hoverboard en Harrisburg, Pennsylvania. Aunque todavía se desconocen detalles específicos, lo cierto es que el dispositivo estaba conectado a la electricidad general de la casa cuando su batería explotó e incendió rápidamente el hogar.
La niña, Ashanti Hughes, estaba con su padre y tres hermanos, cuando el incendió ocurrió. Los bomberos alcanzaron a rescatar a todos los familiares menos a ella. Su padre y hermano mayor están en buenas condiciones, mientras que sus dos otras hermanas pequeñas están en estado crítico aún.
Esto ocurre después de un año que la CPSC ordenara la retirada de todos los hoverboards del país, debido a que no se consideraron como productos que cumplieran con el mínimo de normas de seguridad.
Fue en febrero de 2016 cuando se ordenó la retirada del mercado en su totalidad, luego de que por varios meses se habían reportado explosiones en este tipo de dispositivo.
Explosiones y problemas de seguridad
Los primeros indicios del peligro que significaban los hoverboards para la comunidad se remontan a noviembre de 2015, cuando varias aerolíneas norteamericanas prohibieron la entrada de estas patinetas eléctricas a los aviones por “motivos de seguridad”.
Un mes después, la tienda Amazon de España retiró este tipo de productos de su catálogo por las mismas razones. En esa ocasión, la empresa online prohibió la venta de todos los patines eléctricos que no cumplieran con las normas mínimas, lo que resultó en que no quedara ninguno para la venta en la tienda.