Esta no sería la primera vez que China pierde el control de un reingreso a la atmósfera, en 2020 y en 2021 se repetía el caótico escenario. Ahora, los expertos aún no han podido predecir donde caerán los fragmentos.

Se trata de un cohete Long March 5B cuya misión era llevar un módulo a Tiangong 3, la estación espacial china que actualmente está en construcción. Tras completar su tarea, comenzó un reingreso ‘descontrolado’ a la atmósfera de la Tierra y se espera un impacto para este fin de semana.

La agencia espacial del país asiático y los ingenieros que monitoreaban el cohete, aún no saben ni tienen alguna aproximación de donde podrían caer los fragmentos. Sin embargo, señalan que el riesgo de que caiga en un lugar altamente poblado es mínimo.

A pesar esto, su caída encendió alertas, puesto que bordea las 21 toneladas. Los expertos aseguran que el objeto se desintegrará durante la caída, aunque inevitablemente quedarán algunos restos de gran tamaño.

¿Por qué se descontroló el reingreso del cohete?

El cohete se lanzó al espacio el pasado 24 de julio y su diseño y trayectoria estaban pensados para que cayera en alguna zona segura del océano como acostumbran este tipo de misiones. Esto porque los objetos aeroespaciales de ese tamaño no alcanzan la órbita.

En el caso de Long March 5B si alcanzó a estar en órbita, por lo que a partir de allí los científicos ya no pudieron predecir donde sería la caída, puesto que se desvió de la ruta previamente calculada.

Desde la Corporación Aeroespacial -que lleva el registro de la trayectoria del objeto en movimiento- señalan que lo que caería a la Tierra no será la totalidad del cohete, más bien hasta 9 toneladas de su masa.

“La regla general es que del 20 al 40 % de la masa de un objeto grande llegará al suelo, pero el número exacto depende del diseño del objeto. En este caso, esperaríamos entre cinco y nueve toneladas métricas“, explican.

La última predicción, que el organismo compartió en Twitter, apunta a que el impacto podría darse el próximo domingo 31 de julio. Allí enfatizan que “todavía es demasiado pronto para determinar una huella de escombros significativa”.