Pese a que cada vez más personas tienen acceso a móviles y equipos con sofisticadas cámaras para poder registrar lo que ocurre a su alrededor, los avistamientos de Objetos Voladores No Identificados (OVNI) han disminuido desde hace unos años.

Así lo indicó David C. Korts, estadista del Mutual UFO Network (MUFON), el grupo civil de investigación de estos fenómenos más importante de Estados Unidos.

“Definitivamente ha habido una caída en los últimos años”, señaló en conversación con el sitio Gizmodo en 2018. “La caída no ha sido una línea recta, pero al observar los números encontramos un peak en 2012 y, desde entonces, una caída de 30% a 40% del año 2012 a 2017”, agregó.

El investigador detalló que desde que jubiló, su trabajo apunta a determinar las zonas que poseen más avistamientos, considerando factores como la población y el tamaño del área. No obstante, es categórico en señalar que hay menos personas reportando avistamientos.

“Es algo desconcertante (…) Y no sé por qué. Creo que es una pregunta interesante, y es el tipo de cosas que descubres al hacer este tipo de trabajo”, mencionó.

Por su parte, un reporte del sitio de estadísticas Statista muestra que los avistamientos globales de OVNIs registrados desde hace unos años, cuando se registró un peak de 8.696 de reportes, han disminuido de manera evidente.

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Se trata de una tendencia que coincide con lo observado por Cheryl Costa, geóloga y escritora de ciencia que fue nombrada Investigadora del Año durante el Congreso Internacional de OVNIs de 2018.

Costa analizó los informes de avistamientos no sólo de MUFON, sino que también del Centro Nacional de Informes de OVNIs (NUFORC) durante los últimos 17 años, dando a conocer sus resultados al Syracuse New Times.

Sus conclusiones arrojaron que luego de un aumento en los avistamientos desde 2001 hasta 2012, posteriormente los informes fueron decreciendo.

¿Pero por qué ocurre esto si cada vez hay más facilidades para documentar este tipo de fenómenos? Costa entregó algunas pistas al respecto.

“En la cultura actual de las redes sociales, la forma en la que expresas tus experiencias más extrañas es con algún tipo de video en YouTube o una imagen. Y los OVNIs son realmente difíciles de fotografiar”, mencionó al citado medio.

“Esto no quiere decir que no hay cosas extrañas en el cielo, porque realmente creo que allí hay cosas no identificadas ”, continuó.

“Creo que algo que probablemente deberíamos investigar son las anomalías atmosféricas. Pero cuando las personas interpretan estas cosas como algo creado por vida inteligente u objetos físicos que nos examinan, ya eso no tiene solución. No es algo que pueda ser investigado científicamente”, puntualizó.

A su vez, la escritora de ciencia agrega otra arista: el auge de las conspiraciones exopolíticas, alentadas por supuestos intentos de gobiernos por eliminar todo tipo de información sobre vida extraterrestre.

“Las ideas sobre conspiraciones se han infiltrado y dejaron en segundo lugar la idea de investigar ovnis”, mencionó. “Si no eres capaz de investigar esas cosas es porque son conspiraciones”, complementó.

En tanto, un artículo de El País de España de 2019, en el que se recogen los datos de organizaciones europeas que estudian estos fenómenos, detalla que los avistamientos en Europa de OVNIs también han disminuido.

“El resultado son 13.201 avistamientos en los últimos seis años de los que hay estadísticas, una media de unos cinco al día. En plena era de teléfonos móviles con cámaras de alta calidad, la tendencia es sin embargo decreciente. En 2012 fueron 3.332, y en 2017 solo 1.206″, recoge el medio europeo.