El cantautor se presentará en Gran Arena Monticello antes de partir a México al Vive Latino, en lo que será su regreso a los escenarios extranjeros.

Este 12 de marzo, a días del aumento de los aforos en Fase 4 y de los reclamos de los músicos chilenos para que esto se extienda al 100% (hoy el plan Paso a Paso permite 2 personas por cada 1 metro cuadrado en dicha etapa), Gepe y Beto Cuevas coincidirán en el Gran Arena Monticello en plena reapertura de la cartelera local de música en vivo.

“Cada uno hará su parte, con su gente y sus músicos. A veces la gente se confunde, y piensan que es un show combinado, pero habrán colaboraciones cruzadas”, adelanta a BioBioChile el cantautor sanmiguelino, quien años atrás homenajeó a La Ley con un cover de “Doble Opuesto”.

Para Gepe se trata de un show especial, en el que podrá estrenar en vivo su nuevo sencillo, “Las 4:40”, pero también alistar lo que será su regreso al festival mexicano Vive Latino este mes y, con ello, a los shows internacionales.

“Son conciertos bastante importantes”, adelanta Gepe, quien se ha sumado a la petición de los artistas por aumentar los aforos en los espectáculos musicales, por lejos, uno de los gremios más afectados por la pandemia.

Para Daniel Riveros, nombre de pila del compositor, se trata del retorno a un evento clave en su estela internacional: “El Vive Latino está como en los viejos tiempos. Siempre que he tocado ahí, el público fluctúa entre las 100 mil y 80 mil personas, lo que no es poco. Hace varios años que no vemos eso, lo que me tiene ansioso y contento”.

“Es entretenido, porque cuando algo no les gusta igual te mandan a la chucha. Yo nunca lo he visto acá en Chile de manera tan clara”, confiesa. “A nosotros dos veces se nos cortó la luz, varios minutos, y ellos se quedaron ahí aguantando. Es una situación desafiante, desinhibida. Además es súper social, hay un lugar para compartir y te encuentras con todos”, describe.

En el recinto de San Francisco de Mostazal, es muy probable que no ocurran situaciones así de límite, pero sí que quede en evidencia la sinergia latinoamericana de su repertorio: su último sencillo, “Las 4:40”, no sólo es guiño nítido desde el nombre a la banda de Juan Luis Guerra, sino también una cumbia de reminiscencias aztecas.

(P): La Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales (SCD) está exigiendo volver a un aforo del 100% a raíz de la delicada situación laboral de los músicos. ¿Cómo podrías definir la situación actual del gremio?

(R): Nosotros tuvimos la suerte de hacer, al inicio de la pandemia, conciertos online. No es lo ideal, pero peor era nada: hubo muchos de esos espectáculos. El festival del folclor de San Bernardo fue un buen recuerdo de eso. Pero en el 90% de las ocasiones, no pude llevar a toda mi gente. Somos 12 personas y a veces 16, entre músicos, gente que nos lleva los instrumentos y los artistas que hacen visuales.

Este verano, se supone, la cosa se iba a recuperar en términos de conciertos: teníamos 15 fechas, algo así, y se nos cayeron 12 de un día para otro. Y con todas las entradas vendidas. Con una ley pareja, por último, sería distinto, pero uno ve los malls, los estadios, el transporte, lo que la gente sabe, entonces es injusto, da rabia y mucho coraje. Por suerte esos conciertos han sido agendados para abril y mayo, que ahora será como el enero y febrero de los músicos.

(R): ¿Tienes expectativas de cara a este nuevo gobierno de Gabriel Boric y su nuevo Ministerio de las Culturas?

(R): Estoy seguro que el nuevo ministerio por lo menos se va a preocupar menos de los caballos de bronce de las plazas y va a poner más énfasis en los artistas de la música y del Teatro, que diría que han sido tan golpeados, quizás un poco más, que los músicos, que pueden trabajar por lo menos con más aforo. Estoy seguro que el nuevo gobierno, y el nuevo ministerio, van a dar vuelta la situación. Los números de la pandemia han mejorado también. Creo que los criterios van a cambiar desde el 11 de marzo.

(P): Este 2022 se cumplen 15 años de uno de tus discos más elogiados, “Hungría”. ¿Preparas algún tipo de festejo al respecto?

(R): Y se cumplen 10 años del “GP”. Son discos que les tengo mucho cariño, y “Hungría” viene a ser uno de mis favoritos. Fue un disco donde estaba, en el buen sentido, súper perdido. Venía de ‘Gepinto’ y no venía tocando con las mismas personas. Había incertidumbre y vértigo. Me encanta que el público se acuerde de esos discos, que son piolitas, de muy bajo perfil.

(P): ¿Tienes aún ese polerón blanco de The Beach Boys de los días de la promoción de “Hungría”?

(R): Por supuesto, lo tengo ahí. De hecho lo enmarqué el otro día.