El interesante programa consultado para los días jueves 20, a las 19 horas y sábado 22, a las 19 horas, incluyó tres interesantes obras de la literatura musical, de los connotados compositores Williams, Mozart y Schubert, con la batuta del connotado director italiano, Attilio Cremonesi y la presencia de la pianista japonesa Akiko Ebi.

La presentación comenzó con una pequeña composición del británico Ralph Vaughan Williams (1871-1958), figura de la música contemporánea de su país, una melodía apasionante, que permite imaginar un espíritu contemplativo y religioso por parte del autor que utiliza los instrumentos de un modo totalmente original. Fue una bien lograda interpretación de la Filarmónica, muy ceñida a las instrucciones de Cremonesi quien, fundamentalmente, logró fijar en el público la idea de la presencia de una Catedral.

A continuación se interpretó el Concierto n. ° 23 para piano de Wolfgan Amadeus Mozart. Compuesto en la misma época en la que trabajaba en la ópera “Las Bodas de Fígaro”, Mozart muestra aquí un ejemplo de su estilo innovador, de ideas claras, de brillo y veloces pasajes. La orquesta, por su parte, exhibió en pleno en esta obra el espíritu del austríaco y la solista en piano, la japonesa Akiko Ebi, se lució al darle su sello de gran experiencia y cariño por su participación, particularmente, en los movimientos primero y tercero de la obra.

Franz Schubert, quien tuvo una corta y trágica vida, sólo alcanzó a escuchar su Sinfonía en Do mayor, “La grande”, en un ensayo: la orquesta la consideró muy difícil y decidió no interpretarla. Décadas después de su muerte, con el apoyo de Schumann y Mendelssohn, ésta se transformaría en una de las obras más importantes del siglo XIX.

Dirigido por Attilio Cremonesi, este concierto pareció adentrarnos en el misterio del genio musical. Cremonesi condujo con especial dinamismo y clase este concierto.

Programa

Ralph Vaughan Williams
Fantasía sobre un tema de Thomas Tallis

Wolfgang Amadeus Mozart
Concierto para piano y orquesta n. ° 23 en La mayor, K.488
Solista: Akiko Ebi (piano)

Franz Schubert
Sinfonía n. ° 9 en Do mayor, D.944, “La grande”

Orquesta Filarmónica de Santiago
Director musical: Attilio Cremonesi