Hace dos semanas, el domingo 26 de mayo, Día del Patrimonio, el Presidente de la República firmó el proyecto de ley que busca modernizar la Ley 17.288, de 1970.Desde ese entonces, nada se sabe de él. No ha ingresado al Parlamento, no se ha hecho público, no lo conocen los trabajadores del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio…

Sin embargo, el Proyecto de Ley, que se había anunciado presentar en en octubre, luego en diciembre, después en marzo, para ser firmado en acto público este 26 de mayo, llegó precedido de una serie de polémicas, en especial referidas a la falta de participación en su formulación como a los cambios que realmente propondrá, más allá de los consensos sobre la necesidad de modernizar la ley, actualizar conceptos, incorporar nuevas categorías como Patrimonio Intangible y Paisajes Culturales, y descentralizar la toma de decisiones.

Pero esas ideas generales, arriba expuestas, pueden llevar a propuestas de Ley muy diversos, incluso contradictorias, en especial en los mecanismos y los procesos para declarar Patrimonio, la forma como estarán constituidos y cómo se elegirán los consejeros -tanto nacional como regionales- y los incentivos para el Patrimonio Cultural.

A las dudas anteriores se suma el desconocimiento del Proyecto de Ley de Patrimonio no sólo antes de su firma, sino hasta ahora, dos semanas después. Dos semanas en las que NO ha ingresado al Parlamento, no se ha hecho público, no se le ha dado a conocer a los trabajadores del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio (no siquiera a los que trabajan directamente en esta área y se verán directamente afectados por el Proyecto, de aprobarse).

Los procesos de creación afectan el producto final. Con las leyes pasa lo mismo, en especial al momento de las discusiones al interior del Parlamento y de las aprobaciones.

El proceso de formulación de este Proyecto de Ley de Patrimonio ha sido poco transparente, y la demora no hace sino aumentar esta sensación. Lo anterior, además, fomenta las dudas y los rumores, lo que no es sano desde ningún punto de vista.