La ANFP interpuso una querella contra los que resulten responsables de los incidentes ocurrido en el partido entre Universidad de Chile y Magallanes donde, debido a la detonación de una bomba de estruendo, un joven resultó herido y sufrió la amputación de su pie derecho.
En una conferencia de prensa, el secretario ejecutivo de la ANFP, Óscar Fuentes, indicó que “estamos trabajando en conjunto con el Plan Estadio Seguro para individualizar a quienes cometieron este ilícito y causaron tan graves daños”, agregando que se ha presentado “una querella criminal contra las personas que resulten responsables. Esto no es una declaración abierta, sino que se está investigando y detectando a quienes detonaron estas bombas de ruido”.
Fuentes afirmó que están “en permanente contacto con el simpatizante de Universidad de Chile. Al día de hoy fue intervenido quirúrgicamente, con un amputación de una de sus extremidades. Estamos muy preocupados. (Quienes hicieron esto) son hinchas que no quisiéramos que se acercaran a los espectáculos deportivos”.
También participó de la actividad el jefe del plan Estadio Seguro, José Roa, quien señaló que “Carabineros no va a desaparecer de los estadios ni lo han hecho. Intervienen y seguirán interviniendo en aquellos espacios que son propios de ellos, en coordinación con la seguridad de los clubes”.
Roa dejó en claro que “lo que no puede ocurrir es que los equipos privaticen las ganancias de la venta del fútbol y socialicen las pérdidas a través de sistemas financiados por todos los chilenos. Cada club debe hacerse cargo de sus ingresos, pero también de los gastos que genera la seguridad al interior de los espectáculos deportivos”.