El ministro de Justicia brasileño solicitó este miércoles información a la policía federal sobre las masivas y violentas protestas de los últimos días en Sao Paulo y Río de Janeiro, contra el alza de los pasajes del transporte público.
“No hubo ninguna determinación para la apertura de una investigación policial por la policía federal”, ya que la competencia para eso recae en las policías de cada Estado, precisó una nota publicada en el sitio web.
La noche del martes, unas 5.000 personas protestaron en Sao Paulo contra el alza de las tarifas.
Autobuses incendiados, bombas molotov, gas lacrimógeno lanzado por la policía, basura y vidrios quebrados fueron el balance de una jornada que dejó 20 detenidos.
Ésta se trató de la tercera protesta desde el jueves pasado en respuesta al aumento de 7% del boleto de autobús, metro y tren de 3 a 3,2 reales (de 750 a 800 pesos chilenos aproximadamente).
El lunes, al menos 34 manifestantes fueron detenidos en Río de Janeiro en una manifestación similar, que también se han registrado en otras ciudades brasileñas.
El alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, del gubernamental PT, dijo el fin de semana que busca opciones para reducir el precio del pasaje.
