En total, 13 heridas dejó este miércoles la explosión de una bomba artesanal, hecha con combustible y fuegos artificiales, que un hombre hizo estallar en un centro comercial de la ciudad australiana de Darwin, señalaron diversas fuentes.

“Hubo una explosión (…) causada por una mezcla de combustible y fuegos artificiales”, dijo a la agencia AFP un portavoz del servicio de socorro.

En total, “13 heridos fueron llevados al hospital de Darwin, con lesiones que van de cortes de menor importancia a quemaduras e inhalación de humo”, dijo, añadiendo que ninguno de los heridos estaba grave.

Un hombre que se entregó a las autoridades poco después de la explosión, ocurrida a las 11:00 locales, fue detenido, indicó la policía.

Los medios informaron que entre los heridos estaba un oficial de la policía que inhaló humo.

Testigos citados por el canal de televisión Sky News dijeron que un hombre empujó un carrito de compras cargado con latas de combustible y fuegos artificiales hasta las oficina de una compañía de seguros.

En el edificio atacado, en la calle principal de Darwin, funciona una compañía de seguros y un supermercado Woolworths.