El gobierno estadounidense interrumpió este miércoles la expulsión de haitianos ingresados irregularmente, considerando la situación por el terremoto que devastó Haití, informó el Departamento de Seguridad Interna (DHS por sus siglas en inglés) en un comunicado.

El DHS y el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) “interrumpieron las expulsiones a Haití en respuesta a la devastación causada por el temblor de ayer” martes, señaló el texto.

Haití sufrió un duro sismo el martes, y las víctimas podrían ser decenas de miles, según distintas fuentes oficiales.

En torno a 1,2 millones de haitianos viven legalmente en Estados Unidos, y unos 30.000 estaban pendientes de deportación en febrero de 2009, según informó en esas fechas el ICE.

El gobierno estadounidense ya interrumpió las expulsiones de haitianos a fines de 2008 tras la destrucción causada por cuatro huracanes consecutivos.

Sin embargo, las deportaciones se reanudaron luego.

El gobierno de Barack Obama confirmó en febrero de 2009 que no iba a otorgar el estatuto de protección temporal (TPS) a los ciudadanos de ese país -el más pobre de América-, algo que les daría automáticamente el derecho a permanecer en Estados Unidos mientras se resuelve su caso.

Ciudadanos de otros países como El Salvador, afectados por desastres naturales en el pasado, gozan de ese estatuto.