82 personas fallecidas. Era el saldo humano marcando el inicio de una nueva semana, debido a la propagación del coronavirus. Más de 2 mil pacientes figuran en la lista de contagiados.
Sucedió, además, lo que muchos temían: el virus dejaba su primera víctima mortal en Pekín. Un hombre de 50 años estuvo en Wuhan, epicentro del rebrote, y se trasladó a la capital china. Era portador de la nueva cepa que permite el contagio de un humano a otro.
Con los números rojos acechando desde China, la Organización mundial de la Salud, salió a corregirse públicamente luego que el pasado jueves su director hablara con tal seguridad ante la opinión mundial y en medio del nerviosismo global.
“No se equivoquen. Esta es una emergencia en China, pero aún no se ha convertido en una emergencia de salud global”, decía Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Cuatro días después, una corrección necesaria.
Los últimos días en el mundo han sido de preocupación, expectativa, temores, luto y otros calificativos rondando a un enemigo silencioso.
El número de contagios globales y muertes en China, corrigió la plana a una confiada OMS, hasta ayer.
“Se trata de un error de formulación en los informes de situación de los días 23, 24 y 25 de enero, y lo hemos corregido”, decía un portavoz a la agencia de noticias France-Presse. Justificaba así, la ausencia de una alerta internacional desde la semana pasada y elevaba a categoría de “amenaza mundial” al coronavirus, finalmente.
No es cosa de juegos
Del aislamiento, con más de una decena de ciudades en cuarentena obligada, China pasó a suspender y aplazar importantes citas deportivas internacionales, para evitar concentraciones masivas y por ende nuevos contagios.
Entre las más destacadas se encuentran: la Vuelta ciclista a Hainan, un programa de la UCI ProSeries (segunda división del ciclismo mundial).
Esta prueba iba a celebrarse del 23 de febrero al 1 de marzo en la isla meridional de Hainan, pero fue anulada “como consecuencia de la situación sanitaria en el país”, anunció este pasado lunes la Unión Ciclista Internacional (UCI).
Todo iba sobre ruedas pero el coronavirus llegó como obstáculo ineludible.
Hay más. El Torneo de Boxeo de calificación olímpica, estaba previsto inicialmente del 3 al 14 de febrero en Wuhan. La campana, como alerta, sonó antes que en el cuadrilátero, ya que la sede es el epicentro de la epidemia de coronavirus. El torneo fue llevado a Amán (Jordania) del 3 al 11 de marzo.
Torneo de clasificación olímpica de fútbol femenino: también tenían como sede a Wuhan, del 3 al 9 de febrero.
China, Taiwán, Tailandia y Australia entre los países competidores que ahora deben viajar a Sídney para disputar los encuentros, lejos de la cepa mortal, según anunció la Confederación Asiática de Fútbol (AFC).
Otros eventos como el Torneo de clasificación olímpica de básquetbol femenino (desplazado a Belgrado), el World Series de clavados, la prueba china de las series mundiales de natación sincronizada, prevista del 23 al 25 de abril en Suzhou (este chino) y otras competencias con boleto a Tokio 2020 que inicia el 24 de julio próximo, han sido trasladadas o aplazadas hasta nuevo aviso.
Desde España, medios como lagacetadegalicia, aseguraron este pasado lunes que al menos 4 jugadoras se verán afectadas por el cambio de sede a Belgrado y que priorizarán la salud del resto de competidoras que buscan su boleto a los Juegos Olímpicos.
🚨 OFICIAL | La #SelFEM 🇪🇸 disputará finalmente el PREOLÍMPICO en Serbia 🇷🇸
La @FIBA "prioriza la seguridad de las jugadoras tras evaluar cuidadosamente la situación en China".
📝MÁS INFO ⬇https://t.co/z1JjRPSt1i#SomosEquipo pic.twitter.com/kxPW7BlgaG
— Baloncesto España (@BaloncestoESP) January 27, 2020
En cuanto a la Clasificación para Tokio-2020 de lucha,“seguimos la situación de cerca y estamos en estrecha relación con la federación china y con las autoridades locales”, dijo el presidente de la federación internacional Nenad Lalovic.
“Tomaremos una decisión antes de 15 días. Tres países son ya candidatos a sustituir a China si es necesario: Uzbekistán, Kazajistán y Corea del Sur”.
Repatriados desde Wuhan
Las autoridades de Francia darán inicio a la repatriación voluntaria de sus ciudadanos desde Wuhan. Lo harán vía aérea y de forma directa según lo confirmó la ministra de Salud, Agnès Buzyn.
El retorno tendrá lugar “a mediados de la semana” y “con el acuerdo de las autoridades chinas”.
Las dudas razonables frente a la decisión tienen que ver con qué tipo de garantía se ofrece de que no contagiarán a otros franceses, una vez arriben a su país.
La funcionaria aseguró que el proceso se llevará a cabo bajo la supervisión de un “equipo médico dedicado”.
Los repatriados tendrán que “permanecer en una zona de recepción durante 14 días”, lo que corresponde al período de incubación estimado del coronavirus, aseguró Buzyn.
Por el momento se desconoce la cifra exacta de los que decidirán regresar a Francia, pero en medio de este anuncio, Alemania dijo que analizaba adoptar la misma medida que su vecina europea.
El canciller alemán, Heiko Maas, aseguró a los medios locales que sus connacionales podrían ser retornados a territorio alemán, siempre y cuando quieran volver.
Con las declaraciones, también vino el llamado a la prevención.
“Los viajeros deben pensar en aplazar o anular los viajes que no son indispensables a China”, aseguró Maas.
Ayer fue detectado el primer caso en Alemania, debido a este virus que puede ser mortal según la nueva cepa detectada por científicos.
“Un hombre de la región de Starnberg está infectado con el nuevo coronavirus” y “ha sido puesto bajo vigilancia médica y en régimen de aislamiento”, decía el comunicado de las autoridades.
Gran Bretaña, España y Francia han decidido repatriar a sus ciudadanos de Wuhan, la ciudad china donde inicio el rebrote del coronavirus.
Aún no está claro cuando Alemania podría dar el paso de sus vecinos europeos.
Coronavirus: el “contagio” de los mercados y una economía en riesgo
“Los mercados bursátiles mundiales están bajo presión en este principio de semana ya que los temores sobre la propagación de la epidemia del coronavirus en China crecen”, cita la agencia de noticias France-Presse, a Neil Wilson, analista de Markets.com.
Los índices bursátiles estadounidenses se desplomaron desde el inicio de la jornada, contagiados de temor por el avance del coronavirus. Por ejemplo, el tecnológico Nasdaq y el Standard & Poor’s (que representa a las 500 mayores empresas de Wall Street), bajaban entre el 1,52 y el 1,41%.
Europa y Japón, vivían una jornada similar. China, sede de la crisis sanitaria, se mantenía cerrada por el año nuevo chino.
Pero en lo que respecta a las empresas y las pérdidas que podrían enfrentar, las relacionadas con la industria automotriz, tienen una preocupación latente.
A nivel industrial, Wuhan es un “hub logístico” y centro de producción de automóviles. “Complica más la situación” destaca Standard & Poor’s.
Wuhan es la base de Dongfeng, segundo constructor automotor chino. Los franceses Renault y PSA están aliados a Dongfeng y tienen implantadas en la región muchas de sus fábricas.
La ciudad produjo 1,7 millones de vehículos en 2018 y el sector automóvil genera un volumen de negocios anual de más de 52.000 millones de euros (USD 58.000 millones), según medios locales.
El coronavirus “podría tener un fuerte impacto económico, pero de corta duración”, similar al SRAS, anticipa por su lado Tommy Wu, del gabinete Oxford Economics.
Incluso, según él, el impacto puede ser “menos severo” que en la época del SRAS, debido a que “ahora ha habido una respuesta más rápida de las autoridades”.
Sin embargo, la población se ha mostrado crítica en redes sociales por el papel del gobierno de Habei, la provincia donde resurgió el padecimiento.
Los acusan de no saber la cantidad de producción de mascarillas, respuesta tardía y hasta de usar mal o no usar implementos para evitar contagios en medio del nerviosismo.
Al cierre de este resumen, el petróleo se sumaba a la racha negativa, impulsada por el coronavirus.
El barril de Brent para entrega en marzo bajó 2,3% a 59,32 dólares en el mercado de Londres mientras que en el de Nueva York el crudo WTI también para marzo, cedió 1,9% y quedó en 53,14 dólares.
“Los inversores temen que se enlentezca el crecimiento chino y el turismo a escala mundial. Esos dos factores son claves para la demanda de petróleo”, advirtió Neil Wilson, de Markets.com.
